cultura
La taruca, el monumento natural del Noroeste argentino
Se trata de una especie de ciervos que habita zonas inhóspitas, en filos y laderas escarpadas desde los 1.900 hasta más de 5.000 metros de altura.
La taruca es un ciervo autóctono de nuestro país que constituye un emblema del Noroeste Argentino y que representa un Patrimonio Natural y Cultural muy valioso para esa región.
A su vez, también se la puede encontrar en Perú, el oeste de Bolivia y el norte de Chile. En nuestro país la encontramos en Jujuy, Salta, Catamarca, Tucumán y La Rioja.
Se la suele hallar en pastizales y estepas de altura (entre los 1900 hasta los 5000 metros sobre el nivel del mar) con terrenos escarpados y quebradas abruptas. En Argentina, se registran poblaciones de tarucas en los Pastizales de Altura o Pastizales de Neblina y en los Pastizales Altoandinos.
Desde 2011, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de Argentina tiene en marcha un Proyecto Nacional de Conservación de la Taruca, dentro del cual se monitorea el status de las poblaciones distribuidas por el Noroeste del país, tarea que se realiza en colaboración con las respectivas Secretarías de ambiente de las distintas provincias donde vive el animal.
Se trata de una de las siete especies de ciervo nativas de la Argentina. Posee un pelaje es gris amarillento y los machos presentan una marca oscura o negra en forma de “y” que ostentan en la parte superior del hocico y la frente.
En tanto, las hembras también se distinguen de los machos porque no tienen astas y como en todos los cérvidos, se caen y renuevan todos los años. Cada asta tiene dos ramas, la garceta de atrás es más grande que la de adelante. Las astas se bifurcan desde la base o roseta, a diferencia de su pariente cercano el huemul del sur (Hippocamelus bisulcus), que habita en el sur de la Argentina y Chile, cuyas astas no se dividen desde la base.
La taruca es un herbívoro que se alimenta principalmente de hierbas, arbustos, musgos, líquenes y algunas plantas bajas.
Su altura en cruz varía entre los 77 y 80 cm. Pueden observárselas en grupos de 3 a 20 animales alimentándose de hierbas, musgos, líquenes. Su período de gestación se ha estimado entre 7 y 8 meses, nace 1 sola cría por camada que carece de moteado.