Poca energía: no cesan los reclamos a Edelap en la ciudad

La empresa de luz acumula quejas en los distintos barrios de la región, donde los cortes y la baja calidad del servicio son moneda corriente.

Se acumulan más reclamos hacia la empresa de energía eléctrica Edelap desde los distintos barrios de la ciudad de La Plata, donde los vecinos ya no saben qué vías utilizar para que les den una respuesta a sus problemas.

Así, cada jornada se suman nuevos reproches a la empresa por cortes de energía, baja tensión o falta de arreglos en los medidores y cables que quedan sueltos, lo que además genera otros peligros para quienes los cruzan.

Por ejemplo, los vecinos de la cuadra de calle 6 entre 496 y 497 señalaron: “Tenemos baja tensión hace más de un año. Con los vecinos vamos a elevar una nota a la empresa por esta situación.

Entre el sábado y el domingo cortaron algunas horas supuestamente para hacer mejoras, pero acá seguimos igual”.
Otro reclamo se registró desde el barrio de Gorina, en la zona de 484 y 138, donde estuvieron sin luz desde el mediodía hasta avanzada la tarde.

Un peligro

En tanto, en City Bell, los vecinos se pusieron en alerta por una situación mayor ya que cuando se acercaron a revisar el medidor, descubrieron que estaba en una situación muy precaria y que eso podría traer mayores peligros, en especial para los chicos que pasan por ahí.

“Estamos desde las 23.30 del domingo sin luz y cuando fuimos a ver el medidor nos encontramos con esta situación. Ya hicimos varios reclamos a Edelap. La patrulla vino recién el lunes a las nueve de la mañana. No arreglaron nada y se fueron, despachando el reclamo”, dijo María José, una de las frentistas afectadas.

En tanto, en épocas de cuarentena obligatoria, también ocurre que muchos vecinos hacen compras grandes en los supermercados para evitar salir muchas veces por prevención ante el coronavirus pero con los cortes, los alimentos en la heladera no se pueden utilizar.

“Esto es un peligro no solo porque estamos sin luz y ya perdimos toda nuestra comida, sino porque este medidor está en mi vereda y mi hijo de seis años vive jugando ahí. Esto es un riesgo enorme ya que cualquiera puede quedarse pegado al estar todo al aire libre”, aseguró María José.

Además señalaron que las boletas no reflejan descuentos, sino que por el contrario, los montos son elevados y no responden al servicio prestado por la compañía.

En épocas donde gran parte de las personas trabajan desde su casa y dependen del funcionamiento correcto del servicio, estos cortes generan aún más problemas.

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