Preocupan los colchones de hojas acumuladas en paradas de micros y la rambla

Los vecinos temen que tapen las bocas de tormenta y que no drene el agua si vuelve a llover.

Una de las postales que suele caracterizar al otoño en La Plata son las hojas secas y amarillas que adornan el natural paisaje que completa la arboleda en ramblas y avenidas. Sin embargo este año, el desprendimiento y la caída de estas mismas de los árboles parece haberse extendido más de la cuenta y a poco más de una semana de la llegada del invierno el panorama es complejo.

Haciendo una recorrida por la rambla de la 32, la 72 o las de Barrio Norte o barrio La Loma alcanza para darse cuenta que la acumulación de las hojas ha dejado de ser una postal agradable a la vista de los frentistas.

Sobre la avenida 32, por ejemplo, no son pocos los que temen que ante próximas lluvias puedan quedar tapados los desagües y esto haga dificultosa la circulación del agua.

En las veredas de las cuadras que van desde las vías del tren en 1 hasta 7, enormes colchones de hojas secas vienen ganando un protagonismo inusual para lo que significa la primera quincena del mes de junio, siendo que este paisaje suele verse más bien a finales de abril o comienzos de mayo.

Ayer, sin ir más lejos, algunos vecinos que se acercaron a tomar el colectivo 307 que para en la zona de 3 y 32 se vieron sorprendidos por la gran cantidad de hojas que se habían apilado, dado a que hace varios días que no llueve y que tampoco se pasa a recoger o juntar por el lugar.

Algo parecido ocurre en varias cuadras del barrio La Loma, en especial en los alrededores del complejo Montego. Sobre la calle 39, que luego desemboca en el Parque Alberti, desde 30 hasta 26 resulta imposible distinguir el color natural de las veredas al caminar por la gran cantidad de hojas que no fue barridas en esta zona de La Plata.

Lo mismo ocurre con la rambla de la 53 entre plaza San Martín y Plaza Moreno. Si bien algunas cuadrillas de cooperativas contratadas por la comuna vienen realizando tareas de limpieza, incluso después de las seis de la tarde, la realidad es que la caída natural de las hojas de los árboles ha superado lo previsto para los trabajos que fueron diagramados para la primera quincena de este mes de junio.

Siempre y cuando no llueva en las próximas horas, la intención es poder limpiar la mayor cantidad de calles y veredas del Casco Urbano esta semana, ya que la semana que viene, por distintas razones, solamente habrá dos días hábiles, por lo que se descuenta que el servicio de barrido y limpieza estará reducido el jueves y el viernes y probablemente también el lunes.

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