ciencia

Profundizaron los estudios sobre los circuitos neuronales asociados al procesamiento de olores

A pesar de ser una capacidad sensorial fascinante, es una de las menos comprendidas.

A través del olfato, las personas son capaces de detectar y reconocer una gran cantidad de compuestos químicos en el ambiente, lo que influye en su memoria, emociones y comportamiento. A pesar de ser una capacidad sensorial fascinante, es una de las menos comprendidas. Ante este escenario, integrantes del Conicet procedieron a investigar mejor los circuitos neuronales asociados al procesamiento de olores, para así poder comprender cómo el cerebro procesa la información que recibe del entorno y forma memorias.

“El olfato sigue siendo muy enigmático. Se sabe mucho más sobre cómo funciona la vista, cómo funciona el oído, el gusto o el tacto, pero no el olfato. En el laboratorio estudiamos la percepción sensorial, tomando como modelo la percepción olfativa en ratones”, indicó Noel Federman, parte del equipo a cargo, quién luego cerró: “Descubrimos que hay neuronas en la corteza olfativa que responden a otros aspectos además del olor, como estímulos visuales, y el valor de los estímulos, como recibir una recompensa. Entonces, es probable que la corteza olfativa participe en el cambio en la percepción de un mismo olor en dos contextos distintos”.

Noticias Relacionadas