Tras una reunión con los vecinos, ABSA se comprometió a la entrega de más bidones y asistencia con camiones
Ocurrió tras un encuentro que se llevó a cabo en la sede de 7 y 43, adonde acudieron referentes de los Hornos y otras localidades de la región. “Nos dijeron que durante dos meses más no se va a normalizar el servicio”, expresó una frentista.
En otro enero caluroso, la falta de agua se consolidó como uno de los principales problemas que afecta a los platenses, que a esta altura llegaron a la conclusión de que elegir quedarse en la ciudad se torna una verdadera pesadilla.
Cansados de repetir la historia todos los días, un grupo de vecinos de Los Hornos, San Carlos y Tolosa logró organizar una reunión con referentes de la empresa ABSA, que sobre el final de esta semana recibió personalmente los reclamos en la sede de la calle 7 y 43.
Hasta allí llegaron personas que venían reclamando por lo mismo pero en distintos barrios, y entendieron que la célebre frase “la unión hace a la fuerza” podría arrojar soluciones. En tal sentido, en contacto con este medio, las personas reconocieron la actitud de la empresa para recibirlos; pero admitieron que, por las explicaciones que se dieron, el problema no tendrá una solución en el corto plazo.
“Nos volvemos con la sensación de saber que por dos meses no vamos a tener agua de forma normal como solemos tener”, expresó Mariela Oviedo, una de las referentes vecinales de la zona de 138 y 65 de Los Hornos.
El problema de la falta de agua responde a la saturación y la falta de suministro por la gran cantidad de edificios que se fueron construyendo en la ciudad durante los últimos veinte años y que constituyen un consumo mayor de agua especialmente en los meses de diciembre, enero y febrero, cuando se calcula que las personas se llegan a bañar hasta dos o tres veces por día, o mantienen encendidas las canillas para llenar piletas o tanques en las casas.
De acuerdo a lo que pudo averiguarse, ya se puso en marcha la obra de perforaciones subterráneas para ampliar la red de suministro de agua que se había anunciado en diciembre del año 2020, una obra que contó con un plazo de ejecución de 36 meses.
En ese momento, el que todavía era jefe de ministros, Carlos Bianco, había dado esperanzas para los vecinos de la región, adelantando que para el verano del 2024 la región ya no iba a padecer el faltante de agua en la temporada estival.
El problema de la pandemia retrasó el inicio de la obra, pero se calcula que se trabajará durante todo el 2023 para lograr resultados efectivos a fin de este año, para que ABSA pueda trabajar en el suministro del servicio acorde a la demanda que está teniendo la zona del Casco Urbano y la periferia de La Plata, como así también algunos barrios o localidades de Ensenada o Berisso, como ocurre en Villa Argüello.