Condenan a un hacker finlandés por chantajear a pacientes con historiales de psicoterapia
Julius Kivimäki, uno de los cibercriminales más buscados de Europa, fue sentenciado por intentar chantajear a 33.000 personas tras robar sus notas confidenciales de terapia.
En un escándalo que ha estremecido a Finlandia, Julius Kivimäki, un joven hacker de 26 años, fue condenado por un tribunal finlandés por intentar chantajear a 33.000 personas tras obtener acceso ilegal a los registros de la mayor empresa de psicoterapia del país, Vastaamo.
El caso, considerado como el mayor en la historia judicial de Finlandia debido al número de víctimas involucradas, comenzó cuando Kivimäki irrumpió en las bases de datos de Vastaamo y robó los registros confidenciales de los pacientes. Después de que sus intentos de extorsionar a la empresa fallaran, Kivimäki decidió enviar correos electrónicos directamente a los pacientes, amenazando con revelar lo que habían compartido con sus terapeutas.
La situación alcanzó un nivel crítico cuando al menos un suicidio se relacionó directamente con el caso, lo que provocó una ola de indignación en el país.
Durante el juicio, Kivimäki mantuvo su inocencia, a pesar de que huyó a París y fue arrestado bajo una identidad falsa. Incluso desapareció durante más de una semana después de negarse a regresar a prisión cuando el tribunal lo solicitó.
Los jueces lo declararon culpable de todos los cargos, describiendo su chantaje como una explotación despiadada de la vulnerabilidad de otras personas, especialmente considerando la posición de Vastaamo como una empresa que ofrece servicios de salud mental.
La sentencia marca el fin de una saga de delitos cibernéticos que comenzó cuando Kivimäki era apenas un adolescente de 13 años. Aunque la sentencia ha sido recibida con cierta insatisfacción por parte de las víctimas, quienes consideran que la pena es corta en comparación con el sufrimiento causado, la ley finlandesa ha hablado y Kivimäki enfrentará las consecuencias de sus acciones.