Hamas denunció más de 80 muertos por ataques a un centro de refugiados

El primero de ellos fue contra una escuela que alberga a personas desplazadas. El Ejército israelí no confirmó los bombardeos, pero comunicó que sus tropas estaban ampliando sus operaciones en la Franja de Gaza.

El Ministerio de Salud de Hamas reportó ayer que más de 80 personas perdieron la vida en dos ataques israelíes contra el campo de refugiados de Jabaliya, el más grande de la Franja de Gaza.

El primer bombardeo golpeó al amanecer la escuela Al Fakhura, que alberga a personas desplazadas, y dejó al menos 50 muertos.

El segundo bombardeo dañó una casa en el mismo campo de refugiados y murieron 32 miembros de la misma familia, incluidos 19 niños, según indicó el ministerio, que difundió una lista de nombres.

En imágenes publicadas en las redes sociales se podían ver cuerpos cubiertos de sangre y de polvo en los pisos del edificio donde se habían instalado colchones debajo de los pupitres.

La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa) expresó su indignación por un ataque “horrendo” y pidió que las escuelas dejen de ser blanco de operaciones bélicas.

“Hay cadáveres por todas partes y los equipos médicos intentan evacuar a los heridos”, declaró Tareq Abou Azzoum, corresponsal de la cadena catarí Al ­Jazeera desde Gaza.

El Ejército israelí no confirmó los bombardeos, pero señaló en un comunicado que sus tropas estaban ampliando sus operaciones en la Franja de Gaza, incluyendo algunas partes de Jabaliya, para “apuntar contra terroristas y bombardear infraestructura de Hamas”.

De acuerdo a fuentes médicas citadas por la agencia de noticias palestina WAFA, decenas de muertos y heridos por este ataque, en su mayoría niños y mujeres, fueron trasladados al hospital Indonesio de Gaza.

A principios de noviembre, el gobierno de Hamas anunció más de 200 muertos y cientos de heridos en bombardeos israelíes en Jabaliya repartidos en tres días.

Se trata del campo más grande de la Franja de Gaza, donde más del 80% de los habitantes son refugiados o descendientes de refugiados que abandonaron sus hogares en 1948 con la creación del Estado de Israel.

El 7 de octubre, Hamas realizó una incursión en el sur de Israel en la que mató a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, en tanto que otras 240 fueron secuestradas, incluyendo una veintena de argentinos.

Unos 12.000 palestinos, incluidos 5.000 niños, murieron desde entonces en Gaza en incesantes bombardeos del Ejército israelí, según el balance dado a conocer por el gobierno de la Franja de Gaza a cargo de Hamas.

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