Horror en Brasil: un adolescente mató a tres bebés y dos adultos en un jardín de infantes
Fue en una localidad de Santa Catarina, a 150 kilómetros de la frontera con la provincia de Misiones. El homicida, que atacó con un cuchillo a tres menores de dos años y a dos mujeres, ya fue detenido.
El espanto irrumpió en la mañana de ayer en un jardín de infantes en el municipio brasileño de Saudades, en el Estado de Santa Catarina, a 150 kilómetros de la frontera con la provincia de Misiones.
Tres niños menores de dos años, una maestra y una agente de salud fueron asesinados por un adolescente de 18 años que entró con un facón al jardín de infantes Aquarela. Por motivos que se investigan, el asesino comenzó a perseguir a una maestra, a la que acuchilló, luego siguió con los bebés y una trabajadora de la Secretaría de Salud que estaba en el lugar como parte del operativo especial para dar clases presenciales en el marco de la pandemia.
“Entramos y vimos una escena de terror, niños en el piso, sangre por todos lados”, expresó Gisela Hermann, secretaria municipal de Educación. La trabajadora de salud atacada murió en el hospital regional de Chapecó, a 67 kilómetros de distancia, por no resistir a las heridas recibidas.
El comisario Jerónimo Marçal, de Saudades, expresó que la investigación inicial determinó que otro bebé fue atacado pero quedó fuera de peligro.
“No sabemos qué motivó este ataque, estamos investigando”, manifestó en declaraciones a la prensa el comisario Newton Casagrande, de Chapecó, a 67 kilómetros del lugar de los crímenes.
Cabe señalar que el establecimiento estaba semivacío a raíz de que no se permite más del 35 por ciento de aforo en las escuelas a raíz de la pandemia.
La maestra Aline Biazebetti, vecina de la guardería, contó que estaba a pocos metros del lugar durante la masacre, escuchando gritos de socorro y pedidos para llamar a la Policía. “Lo primero que hice fue llamar a la Policía pero no podía hablar, apenas pedí auxilio. De pronto vi a todas mis compañeras sacando corriendo a los chicos, uno con heridas. Nadie podía pensar algo así, incluso había poca gente por las limitaciones de la pandemia”, señaló.