Rusia volvió a impedir nuevos avances ucranianos en Kursk

El Ministerio de Defensa de Rusia reconoció ayer que ha tenido que impedir nuevos intentos de avance de las tropas de Ucrania en la región fronteriza de Kursk, escenario de combates desde el martes.

“Se han rechazado los intentos de algunas unidades (ucranianas) de adentrarse profundamente en territorio (ruso) en el sector de Kursk”, señaló en un comunicado el ejército de ruso.

En tanto, el consejero presidencial ucraniano, Mijaílo Podoliak, precisó ayer que la operación es una consecuencia de la “agresión” rusa contra su país.

Desde Kiev, afirmaron que las fuerzas ucranianas han logrado controlar unos 400 kilómetros cuadrados de territorio ruso.

“La causa primordial de cualquier escalada, cualquier bombardeo, cualquier acción militar (…), incluso dentro del territorio de la Federación Rusa como las regiones de Kursk y Bélgorod, es únicamente la agresión rusa”, indicó Podoliak en X.

El gobernador de Kursk, Alexei Smirnov, decretó el miércoles por la noche el estado de emergencia en la región, una medida que otorga a las autoridades poderes adicionales para controlar la situación.

Al menos cinco civiles han muerto y 24 han resultado heridos desde el inicio de la incursión, 13 de los cuales han sido hospitalizados, según las autoridades rusas.

Las tropas ucranianas penetraron el martes en la región de Kursk, en el suroeste de Rusia, con unos 1.000 soldados y una veintena de vehículos blindados y tanques. Se trata de la acción más importante de incursión fronteriza por parte de Ucrania desde que Rusia lanzó su ofensiva militar en febrero de 2022.