Garro quiere aplicar el Código de Convivencia Ciudadana

Con el inicio de las sesiones del Concejo Deliberante platense, en la jornada de mañana comienza de ma­nera “formal” la tarea legislativa. En ese marco, el Ejecutivo comunal tiene apuntado que en el primer semestre de este año se logre sancionar el Código de Convivencia Ciudadana.

Si bien el año pasado la pandemia ­complicó la actividad en el ámbito legislativo, el jefe comunal no estaría del todo feliz con el “planchazo” que sufrió el proyecto que el propio Garro considera “fundamental”, sobre todo en un año electoral en el que los cañones apuntan a un voto de la clase media platense, que viene elevando algunas quejas sobre la utilización y el uso del espacio público.

De hecho, comenzó a marcar la cancha, por ejemplo, a la hora de reunirse con los presidentes de Gimnasia y Estudiantes, Gabriel Pellegrino y Juan Sebastián Verón, respectivamente, en pos de avanzar en una campaña contra las pintadas en la vía pública de ambas parcialidades, lo cual, dicho sea de paso, está contenido en el nuevo Código con la aplicación de sanciones.

Los antecedentes

El derrotero de este proyecto comenzó en 2018, cuando el intendente Julio Garro lo presentó en la apertura de sesiones extraordinarias como una de las principales iniciativas de su gestión de ese año y planeaba que este llegara al segundo semestre listo para ser tratado en el Concejo Deliberante. Sin embargo, el primer debate se dio en mayo de 2019, pero el escenario no fue promisorio para un avance rápido del polémico expediente, el cual establece duras sanciones para distintas contravenciones.

Los puntos de la discordia

En principio, hay que señalar que establece el “módulo” como una unidad de sanción equivalente al 2% del sueldo básico nominal inicial del “personal de planta permanente” de la Municipalidad.
Asimismo, de acuerdo a la gravedad o reincidencia de la contravención, plantea la prisión para quien viole la normativa.

En ese marco, hay que mencionar que la oposición cuestiona, por ejemplo, la sanción para aquellos que realicen movilizaciones sin haber cumplimentado un trámite de registro que las autorice previamente.

En otro punto, la norma plantea sanciones contravencionales para “quien lavare automóviles ajenos de forma onerosa en la vía pública, que será sancionado con multa de 50 a 300 módulos”.

Por último, un artículo que también tuvo repercusiones fue el que incluye la sanción “con multa de 50 a 600 módulos y/o trabajo comunitario para los padres, tutores o ­guardadores de menores de edad por los daños que estos causaren en el espacio público municipal, con motivo de los festejos de inicio o finalización del año lectivo o en el contexto escolar”.