Jorge Rachid tras ser rescatado de Lago Escondido: "Nos decían que nos iban a matar"
El médico sanitarista fue rescatado por un helicóptero de la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua.
Tras haber sido rescatado por un helicóptero de la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (Fipca), el médico sanitarista Jorge Rachid, retenido en Lago Escondido, relató en diálogo con C5N lo vivido durante estos últimos dos días.
"Recién llegados a Bariloche, fue una jornada difícil la de ayer y anteayer por una situación inédita de una patota encapuchada que corta un acceso público (al Lago, que está ubicado dentro de las tierras de Joe Lewis)", relató. Rachid se encontraba retenido luego de haber denunciado haber sido "hostigado" el pasado fin de semana mientras participaba de la “Sexta Marcha de Expedición por la Soberanía” a Lago Escondido, ubicado en la zona cordillerana de la provincia de Río Negro.
El médico reconoció que aún se está recuperando tras haber pasado 14 horas a la intemperie, insolado "porque el sol era muy fuerte" y la patota comandada por "el segundo de Lewis" los amenazó de muerte.
"Desde el Lago Soberanía inflamos los botes para seguir con nuestra ruta hacia el Lago Montiel, unos 2 kilómetros. Veníamos transitando sin ningún problema. Cuando llegamos con las cinco primeras canoas nos encontramos con esta situación de personas encapuchadas. La mitad estaba a caballo, la otra, a pie. Nos dijeron 'ustedes no ponen un pie en tierra acá'. Nos pincharon un bote y empezó un proceso de discusión. Tuvimos que atar los botes, teníamos que darle aire permanentemente. Teníamos que seguir caminando", expresó.
Y agregó: "Después de un par de horas llegó la Policía y actuó de manera neutral, como si fuese un conflicto entre alguien que no te deja pasar en un acceso público, que el expresidente Macri junto con Lewis dijo que estaba habilitado", señaló en referencia al trato cordial y directo que Mauricio Macri mantiene hasta el día de hoy con personajes como el británico Lewis, propietario de 12.000 hectáreas en la provincia de Río Negro.
"Se clausuró un acceso público por una patota donde estaba el segundo de Lewis dirigiendo de atrás. Nos amenazaban y nos filmaban ellos a nosotros. Lo más fuerte que yo escuché fue que si bajábamos nos iban a pinchar el bote, que íbamos a saber quiénes eran ellos, que eran la Patria y nosotros éramos los extranjeros", dijo.
"No nos dejaron pasar y la noche de anoche hubo escopetazos toda la noche, que seguramente serían al aire, como forma de amedrentamiento", agregó.