Pablo Moyano renunció a la conducción de la CGT

Este viernes por la tarde, Pablo Moyano presentó su renuncia como co-secretario general de la CGT, marcando una fractura en la central obrera. La decisión llegó tras el rechazo de la "mesa chica" a su pedido de un paro general contra las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei. "No coincido con las decisiones tomadas", afirmó en la carta dirigida al Consejo Directivo Nacional.

El líder camionero quedó aislado frente al sector dialoguista de la CGT, encabezado por Héctor Daer y Carlos Acuña, que apostó por abrir un canal de negociación con la Casa Rosada. La medida fue decidida por unanimidad, desestimando cualquier movilización inmediata. “No es momento para medidas extremas, menos con la inflación a la baja”, expresó un dirigente cegetista.

El desacuerdo dentro de la CGT se materializó durante una reunión en la sede de UPCN, donde el sector dialoguista priorizó el "diálogo como llave maestra para resolver los conflictos". Según testigos, la decisión fue unánime y buscó evitar tensiones adicionales a fin de año. Esto dejó a Moyano aislado, quien había condicionado su continuidad en la central a una reacción contra el gobierno tras la huelga de transporte del 30 de octubre.

Con esta renuncia, Moyano busca ahora consolidar alianzas con la CTA, movimientos sociales kirchneristas y la izquierda, con quienes planea una movilización para el 5 de diciembre. En tanto, su reemplazo será designado por el Sindicato de Camioneros, pero el futuro del moyanismo en la CGT queda en duda.