Quintela y Cristina tienen todo listo para la interna del 17 de noviembre

Por primera vez en más de tres décadas, el Partido Justicialista (PJ) irá a una interna para elegir a sus autoridades nacionales, poniendo en el centro de la escena la disputa entre la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela. Este enfrentamiento, marcado por diferencias profundas sobre el futuro del peronismo, expone la fragmentación interna y la falta de un acuerdo de unidad.

Cristina Kirchner, convencida de que este proceso era necesario para legitimar su liderazgo, comenzó a armar su lista con apoyo de sectores clave del peronismo. La lista Primero la Patria incluye a dirigentes de peso como el titular del bloque en el Senado, José Mayans; la senadora catamarqueña Lucía Corpacci; el líder del bloque de Diputados, Germán Martínez; la intendenta de Moreno, Mariel Fernández, y el secretario general del SMATA, Ricardo Pignanelli. Además, la lista incorpora a figuras del sindicalismo, como Víctor Santa María, y a intendentes peronistas, como Mayra Mendoza.

Por el lado de Quintela, el armado de su lista, denominada Federales, fue más complicado y se extendió hasta el último momento antes del cierre de candidaturas. La primera vicepresidencia quedó en manos de Magda Ayala, intendenta de Barranqueras, Chaco; mientras que el exgobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, ocupa la segunda. La lista se completa con Mariana Gadea, secretaria general de UPCN, Roque Álvarez, presidente del bloque peronista en la Legislatura de Tucumán, y Alba Sánchez, intendenta de La Viña, Salta.

La elección interna del PJ, pautada para el 17 de noviembre, genera gran expectativa dentro del partido, ya que ambos sectores han presentado propuestas que reflejan visiones diferentes sobre el futuro del peronismo.

Mientras Cristina Kirchner busca mantener una postura opositora firme frente al Gobierno de Javier Milei, Quintela ha apelado a la necesidad de renovar el partido. El Gitano ha defendido su candidatura como una “transición” hacia nuevas generaciones y ha subrayado la importancia de modificar “conductas, métodos y formas” dentro del partido.

El cierre de las listas expuso además una lucha soterrada entre La Cámpora y el resto del peronismo. La lista de Cristina Kirchner, a pesar de los intentos por sumar a todos los sectores, dejó fuera de los principales cargos a los dirigentes más cercanos a Kicillof, lo que agudizó las tensiones internas. Desde el Instituto Patria, el mensaje fue claro: “Que haya interna da legitimidad, el que gana conduce y el que pierde acompaña”. Este discurso refleja la determinación de Cristina Kirchner de mantener el control del partido y evitar cualquier concesión en pos de la unidad.

Por su parte, Quintela se ha mostrado firme en su decisión de competir, a pesar de los rumores que sugerían que podría dar un paso atrás en el último momento. “Nos necesitamos mutuamente después del proceso electoral”, expresó el gobernador, buscando bajar el tono del conflicto.