Amparados por un matorral que el municipio no quitó, asaltaron a un matrimonio en Etcheverry
Dos ladrones estaban ocultos entre ramas y hojas. Sorprendieron a una pareja y le sacaron sus pertenencias. Indignación en la zona.
En las últimas horas se produjeron al menos dos nuevos robos callejeros en diferentes sectores de nuestra ciudad. Se relacionan, entre otras cosas, porque ambos permanecen impunes y nada se sabía de los autores hasta el cierre de esta edición.
En uno de ellos, además, se vio involucrado de cierta manera el municipio platense, ya que los ladrones actuantes se escondieron detrás de un matorral de ramas acumuladas desde marzo para cometer el ilícito contra una pareja.
Fuentes policiales indicaron que este suceso se materializó alrededor de las 20 del miércoles en Etcheverry, sobre las calles 45 bis y 242. Un matrimonio que estaba regresando a su casa fue abordado por dos hampones que salieron de atrás de una montaña de ramas y hojas amontonadas, que nadie retira desde el pasado mes de marzo, pese a los insistentes pedidos de los vecinos.
Sin exhibir armas de fuego, pero amenazándolos de palabras, los obligaron a entregar las pertenencias que llevaban consigo y entonces las víctimas se desprendieron de sus teléfonos celulares y otros elementos de valor. Con eso, los atracadores se dieron a la fuga y permanecen libres.
“Salieron de entre las ramas y no nos dieron tiempo a nada”, dijeron los damnificados, asegurando que los asaltantes eran jóvenes y, de acuerdo a los lugareños, se trata de personas del barrio.
A su vez, los frentistas denunciaron: “El matorral es cada vez más grande y desde la Municipalidad no nos dan respuestas. Hace siete meses que estamos así. Necesitamos mayor seguridad y limpieza en Etcheverry, porque nos tienen olvidados y es el lugar perfecto para la delincuencia”.
En Gonnet
En zona Norte, sobre Camino Centenario y 495 de Gonnet, dos motochorros intimidaron con una cuchilla a una mujer y le sacaron el celular.
“Lo material va y viene, gracias a Dios la saqué barata”, expuso la víctima en su red social de Facebook. Ahora, los investigadores analizan si los malhechores son los mismos que tienen a maltraer a la gente de la zona, con recurrentes incidentes similares.