Comenzó el juicio a una pareja acusada de raptar a una niña en Punta Indio

El hecho ocurrió en octubre del 2019 y generó conmoción en la región. Los acusados dijeron que buscaban proteger a la menor de presuntos maltratos

El Juzgado Correccional n°4 de La Plata, a cargo de Claudia Greco, comenzó ayer el juicio oral a María Agüero (36) y Eric Rivarola (23), acusados de haber inducido a una menor a irse de su casa, para luego mantenerla raptada y mentir mientras la ocultaban en una vivienda de Punta Indio, partido de Magdalena.

En octubre del 2019, la desaparición de A.C. (10), generó conmoción en la región y en el país. A partir de ese momento, el fiscal Juan Menucci activó el protocolo de búsqueda por parte de la Policía en la zona de la ribera del río de La Plata, con la colaboración de personal de Bomberos Voluntarios.

Los acusados habían denunciado a madre de la menor por abandono. Diez días antes de su desaparición, un Juzgado de Familia ordenó que la niña debía regresar con su progenitora luego de estar viviendo con sus abuelos en City Bell.

En declaraciones a los medios, Agüero manifestó que tanto A.C. como su hermanita (que en ese momento tenía cuatro años) habían sido abusadas por su padrastro y que eran maltratadas por su madre. Por ello, la pareja consideraba a la criatura como su “hija del corazón”, por lo cual querían protegerla.

Detención

Luego de haber declarado en dos oportunidades, Rivarola se quebró y confesó que la menor había estado siempre con él y con su mujer. Por pedido del fiscal, el juez de Garantías, Eduardo Silva Pelossi, ordenó sus detenciones, por el delito de “sustracción de menores en concurso real con falso testimonio”.

Están sospechados de haber ocultado a A.C., que desapareció de su casa el miércoles 9 de octubre del 2019, cuando su madre le dio permiso para ir a buscar una muñeca que se había olvidado en la costa del río de la Plata, cerca de la vivienda que ocupaban.

Para los investigadores, A.C. fue víctima de manipulación por parte de la pareja, algo que se evidenció y manifestó “tanto en los argumentos como en los silencios, que no serían propios de su expresión”.

Para los instructores del caso, a la vez que la pareja mantenía un control sobre la niña, trataban de “entorpecer y desviar el foco de atención” mediante los mensajes que transmitían en los medios, “dañando y desacreditando la figura maternal”.

Ayer comenzó y finalizó la declaración de los testigos y la exposición de la prueba, y hoy se realizarán los alegatos de la fiscalía y de la defensa.

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