Más detalles sobre el ataque a piedrazos al auto de una mujer embarazada

Desconocidos le arrojaron un cascote al vehículo en el que iba una familia acompañada de su nena de 5 años. Sucedió en el límite entre Ringuelet y Gonnet.

Un violento ataque vandálico perpetrado por delincuentes generó conmoción entre los vecinos de las localidades platense de Ringuelet y Gonnet. Se trata del caso ocurrido en las últimas horas en el que una familia sufrió una agresión a piedrazos mientras se desplazaban con su vehículo que sufrió lo rotura de sus cristales.

Tal como informó diario Hoy, el episodio sucedió cuando las víctimas circulaban con su automóvil por las calles 7 y 509, cuando de pronto fueron sorprendidas por un gigantesco cascote que cayó sobre el parabrisas. En medio de la tensión y ante la inminente intención de robo, el conductor pudo controlar el volante y no se detuvo para evitar ser asaltado.

En el interior del coche viajaba una familia, compuesta por un hombre, una mujer embarazada de seis meses y una pequeña niña de 5 años, que iba sentada en el asiento de atrás. Apenas escucharon el fuerte estruendo, el pánico se apoderó de la escena, pero el padre decidió continuar con el camino y frenar algunas cuadras más adelante para verificar las roturas.

Según se supo después, el piedrazo impactó primero en el fierro del limpia parabrisas y luego hizo estallar el vidrio, que quedó todo astillado. Desde entonces, comenzaron a tejerse algunas hipótesis y la versión con más fuerzas es que se trataría de un grupo de ladrones que ejecutan estos ataques para asaltar a los automovilistas que pasan por allí.

Luego del cascotazo, el conductor frenó algunos metros más adelante y allí pudo observar entre 15 y 20 personas (menores y adultos) a las corridas que serían los protagonistas de la salvaje agresión.

En ese marco, los efectivos policiales se anoticiaron del episodio y comenzaron una investigación para intentar dar con los responsables.

Este tipo de ataques vandálicos sucedieron en otras ocasiones en las inmediaciones, incluso pocos meses atrás un colectivo de la línea Norte fue apedreado por un grupo de jóvenes que huyeron. Es por eso que, ante la repetición de los hechos de inseguridad, los vecinos de los alrededores denunciaron que el barrio se convirtió en una zona liberada.

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