Realizaron la audiencia de ofrecimiento de prueba por un salvaje crimen homofóbico
El acusado es Tomás Cerletti, que padece trastorno de personalidad. Walter “La Chico” Chirino fue atacada con un cuchillo en octubre del 2019
El Tribunal Oral en lo Criminal n°1 de La Plata realizó la audiencia en la cual las partes ofrecieron las pruebas que tendrán en cuenta en el juicio por jurados a Tomás Cerletti (25), acusado de haber asesinado brutalmente a puñaladas a Walter “La Chicho” Chirino (49), el 26 de octubre del 2019.
Según la investigación del fiscal Marcelo Romero, el imputado le dijo a la Policía: “Le clavé un cuchillazo al tipo porque me dijo: Qué lindo que sos. Me pegó una piña y lo clavé todo”. Encontraron a la víctima agonizando cerca de la Terminal, en calle 41 entre 2 y 3, y la llevaron al hospital San Martín, donde murió al día siguiente.
Cerletti, “valiéndose de un cuchillo infringió numerosas puñaladas en zonas vitales” del cuerpo de Chirino, “propinándole a su vez puntapiés en las mismas regiones” mientras se encontraba “en pleno estado de indefensión y sin posibilidad alguna de oponer resistencia, ya que yacía en la vereda en estado de inconsciencia”, sostuvo el fiscal en la requisitoria de elevación a juicio.
La autopsia realizada al cuerpo “da cuenta de la gravedad de las lesiones proferidas y de la saña y la alevosía” con las que el actuó el acusado. “La Chicho” falleció a raíz de un “shock hipovolémico secundario a lesión pulmonar por arma blanca”.
Para dar con Cerletti, los investigadores siguieron un rastro de sangre hasta el picaporte de su casa, donde vivía con su padre, a metros de la escena del crimen. La Policía encontró al acusado lavando la ropa, intentando destruir las pruebas del delito. Los peritajes constataron que tenía heridas en la palma de su mano derecha compatibles con el uso del cuchillo. Finalmente hallaron el arma entre unas plantas de un vivero. Quedó entonces detenido por orden de la jueza Marcela Garmendia.
Problemas psiquiátricos
Las pericias psiquiátricas declararon al imputado con “un transtorno de personalidad esquizotípico”, por lo cual la magistrada ordenó que esperase en una institución psiquiátrica la llegada del debate oral, que será mediante juicio por jurados, aunque aún no hay una fecha estipulada de inicio.
Durante la entrevista con el psiquiatra, el hombre contó que tomaba medicación y que había estado internado en una institución de salud mental en La Plata. También dijo que fue víctima de maltrato escolar por parte de sus excompañeros de secundaria, y que cuando tenía 17 años sufrió acoso constante por parte de un hombre homosexual al que intentó “asustar” mediante el uso de un arma blanca.
En un primer momento, la causa se había caratulado el caso como “homicidio calificado por alevosía y ensañamiento”, pero la jueza le sumó el agravante de “odio al género y a la orientación sexual”.