Salvaje robo a una jubilada en Tolosa: la Policía nunca acudió
Si bien un joven que asistió a la víctima llamó al 911 en dos ocasiones, el patrullero brilló por su ausencia. Los vecinos señalan que la zona está liberada.
Nuevamente una jubilada fue víctima de un hecho delictivo en las calles de nuestra ciudad, y otra vez el implicado se dio a la fuga. Los vecinos apuntaron de nuevo contra la Policía y volvieron a afirmar que la zona está liberada.
En esta oportunidad, el suceso de inseguridad tuvo lugar en las últimas horas en la zona de 119 y 526 (Tolosa), donde una mujer mayor, mientras caminaba, fue sorprendida por un motochorro. Armado, el bandido la amenazó de muerte y le exigió las pertenencias que llevaba consigo. Indefensa, la damnificada no se resistió en ningún momento y le dio todo lo que tenía. “El delincuente se llevó dinero en efectivo, un celular y, además, la documentación que la femenina tenía encima, como por ejemplo una tarjeta de débito”, le contó a Trama Urbana un jefe de la fuerza.
Con todo eso en su poder, y la situación totalmente dominada, el hampón se perdió de vista en cuestión de segundos, pero la historia no terminaría allí, ni mucho menos.
Cambios constantes de comisarios
Un joven que pasó por el lugar y vio a la víctima intentó ayudarla con lo que pudo. De esta manera, se comunicó con el 911 para reportar el ilícito con el fin de que los numerarios intervinientes fueran a buscar al responsable del hecho.
Sin embargo, mayúscula fue su sorpresa a medida que pasaban los minutos y ningún móvil se hacía presente, pese a que la operadora le había asegurado que iría alguien de manera urgente. Desesperado, el hombre volvió a comunicarse, ya sin la esperanza de poder atrapar al malhechor, debido al tiempo transcurrido. Insólitamente, en este segundo llamado la operadora admitió que “los oficiales se equivocaron de dirección”, dejando librada al azar a la perjudicada.
“Pareciera que liberaron la zona, no se aguanta más, todos los días nos enteramos de que algún vecino fue víctima de un robo”, se lamentó un lugareño, y otro directamente lo afirmó: “La zona está totalmente liberada, aunque cueste creerlo. Llamás al 911 y es lo mismo que no hacerlo”.
No está de más aclarar que en siete años pasaron por la comisaría Sexta, con jurisdicción en la zona, nada menos que 18 comisarios, pero ninguno logró llevar tranquilidad a un barrio cada vez más asediado por la delincuencia y en donde los residentes ya no se encuentran tranquilos ni siquiera a plena luz del día.