Simuló estar interesada en un alquiler y asaltó una vivienda junto a una banda
La entradera ocurrió cerca de la plaza Sarmiento y los delincuentes se alzaron con dinero en efectivo y otros elementos de valor.
A la hora de cometer ilícitos, los delincuentes ponen todo su empeño en buscar alternativas ingeniosas para perpetrar los asaltos, y eso fue lo planeado por una banda criminal que ejecutó una brutal entradera en proximidades de la plaza Sarmiento. Para poder ingresar a la finca, una mujer simuló estar interesada en alquilar en un complejo de departamentos, engañó a un joven y, tras ganarse su confianza, sus dos compañeros lo desvalijaron a él y a su madre.
Todo sucedió por la tarde en un PH ubicado en la zona de las calles 20 entre 65 y 66, hasta donde se dirigió una mujer de unos 30 años y golpeó las puertas de un domicilio. La atendió un sujeto de 27 de nacionalidad peruana que vive junto a su mamá y, apelando a una artimaña de seducción, la sospechosa le preguntó por una supuesta propiedad en ese pasillo para poder mudarse.
Sin embargo, el chico le comentó que no era la dirección que ella buscaba y la femenina abandonó el lugar. De todos modos, a los 15 minutos regresó, volvió a llamar a la puerta y decidió abrirle nuevamente debido a juzgar por su aspecto físico no había nada que le llamara la atención. Enseguida, detrás de la acusada aparecieron dos hombres y se metieron a la casa por la fuerza.
Según trascendió, ambos hampones tenían sus rostros cubiertos con barbijos y gorras, a la vez que utilizaron guantes en sus manos para no dejar sus huellas. Sin perder tiempo, uno de ellos exhibió un revólver y lo obligó a entrar a los empujones, en una secuencia que estuvo cargada de violencia y tensión.
Huyeron y son buscados
Los ladrones le ataron sus manos y pies, mientras recorrían todos los rincones del departamento. Estuvieron durante casi una hora, hasta que finalmente se alzaron con alrededor de 500 dólares y 1.200.000 pesos, que eran los ahorros que tenía el muchacho junto a su madre. Con ese botín, sumado a joyas, perfumes, ropa, un iPhone y una PlayStation 3, los maleantes se dieron a la fuga y hasta el momento poco se sabe de ellos.
Según pudo reconstruir la Policía, los delincuentes huyeron a bordo de una camioneta Toyota Hilux blanca, que estaba estacionada afuera y en la que los estaban esperando otros cómplices, que también son intensamente buscados.