por gabriel pedrazzi
El empate fue justo, el Lobo pide a gritos un delantero que haga goles
El ex delantero analiza los motivos por los que Gimnasia no pudo marcar la diferencia frente a Sarmiento.
De entrada, los dos equipos trataron de ser prolijos y precisos con la pelota, a pesar de cómo estaba la cancha, porque había llovido mucho y estaba muy rápida. Por eso, al principio les costó hacer dos o tres pases seguidos.
Está claro que cuando Brahian Alemán se pone en la zona de gestación, de tres cuartos de cancha hacia adelante, el equipo se torna muy peligroso. En cambio, cuando el uruguayo se tira para atrás y se pone a lanzar pelotazos largos, resulta previsible.
Ayer se notó mucho más que antes la dependencia de Carbonero. Es muy desequilibrante y muy peligroso. Creo que necesita más de Alemán en la zona de gestación. Además, tenía que haber entrado más en acción Pérez García. Ese jugador de experiencia que el equipo requería para hacer lo que hizo Alemán en el segundo tiempo.
En la defensa sufre mucho con las pelotas cruzadas. Se vio y se notó. Así como Carbonero fue tan importante para Gimnasia, Alaniz lo fue para Sarmiento. Un atacante que fue a todas las pelotas.
El partido se jugó con mucha dureza, extrema diría yo para como estaba el campo de juego, y pudo haber lesionados, que por suerte no hubo. En la parte final, los equipos se atacaron y se estudiaron, pero a partir de los 30 minutos Gimnasia fue muy superior y terminó mejor el partido. Los últimos 15 minutos se lo llevó por delante a Sarmiento. Tenía que hacer un gol y ganar el partido. Así lo transformó en figura al arquero local.
Gimnasia necesita gol y eso está claro. También necesita seguir colocando a Carbonero y Alemán como en el segundo tiempo, en la zona de la gestación del juego.