por galopon

En la carrera de los “ciegos”, como se esperaba, Emmbrujo fue el rey

En una versión muy desteñida del Clásico Jockey Club de la Provincia de Buenos Aires (G.II-2.000 mts.), el triunfo fue para el favorito en un discreto registro de 2m06s 72/100.

Por GALOPóN

En una tarde agradable, el teatro del turf del Barrio Hipódromo levantó el telón para ofrecer un programa de 14 actos con la atracción principal del tradicional Clásico Jockey Club de la Provincia de Buenos Aires (G.II-2.000 mts.), donde se impuso el gran favorito Emmbrujo, que de esta manera consolidó su supremacía sobre sus congéneres. Fue lo único destacable de una desteñida versión de este Clásico que forma parte (es la segunda gema) de la triple corona platense.

El ganador vino todo el recorrido cerca del fuego que alimentaba el perdedor Espíritu Corajudo al que rebasó ni bien pisaron el derecho y escapó para cruzar el disco con cuatro cuerpos de ventaja sobre Del Otario, mientras que tercero a largo y medio Espíritu Corajudo completaba el podio.

La carrera estaba reservada para productos nacidos desde el 1º de julio de 2019. Hubo asistencia perfecta por lo que los nueve participantes salieron a la pista y la cátedra, tal como se esperaba, mostró su preferencia por Emmbrujo ($1,35). En carrera, el hijo de Emmanuel respondió en forma amplia a dicho plebiscito.

El ejemplar conducido por el ­jockey Leandrinho Goncalves logró el séptimo triunfo en 12 salidas con la particularidad que todos sus éxitos son de nivel jerárquico y que para ganar en esta oportunidad empleó el discreto registro de 2m06s 72/100 para los 2.000 metros de pista normal.

Ordenada la suelta, Espíritu Corajudo desde el cajón dos largó presto, primereando a Emmbrujo y a León Gallardo, quedando luego Del Otario y Stuven. Así pasaron por primera vez frente al disco y al zambullirse en el codo del Colegio Nacional, el puntero corría con largo y medio de luz sobre el favorito, quedando muy cerca por los palos León Gallardo y abierto Del Otario, que se adelantaba por poco a Stuven.

Por la señal de la milla, Espíritu Corajudo le imprimía un ritmo cadencioso a la carrera, estirando a dos cuerpos la ventaja sobre León Gallardo y Emmbrujo que corrían en parecida línea, por delante de Stuven. Al ingresar a la recta opuesta, el vanguardista mantenía en dos cuerpos la ventaja sobre León Gallardo y Emmbrujo, precediendo a Stuven, Del Otario y Etoo.

No variaron dichas posiciones en toda la recta de enfrente y el ingreso a la elipse de la calle 41 mostró a los protagonistas que se iban juntando con León Gallardo y Espíritu Corajudo accionando en parecida línea, con el favorito que por afuera se los venía llevando por delante, con leve margen sobre Stuven. Mientras tanto, por adentro se acercaban Toital Boss, Del Otario, Don Fidel Letal y Archimboldo, ello debido al tren lento de carrera. Así completaron la curva y al desembocar en el derecho, casi por inercia Emmbrujo, por media cancha, rebasó la línea de Espíritu Corajudo, mientras que de atrás solo progresaba Del Otario. No hubo novedades ni emoción en las postrimerías y el favorito, a partir de los 150 metros, se desprendió fácil para cruzar el disco con suficiente ventaja sobre Del Otario, que en tibia atropellada rebasó a Espíritu Corajudo para dejarlo tercero. En síntesis, para Emmbrujo fue tan solo un trámite esta desteñida segunda gema de la Triple Corona.

Finalmente, el ganador empleó estos parciales: 26s 50/100 para los primeros 400 metros; 51s.57/100 para los 800; 1m16s 09/100 para los 1.200 y 1m40s 85/100 para los 1.600 metros.

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