Historias de Lobas y Panteras: la pasión por Gimnasia en la zona Sur de La Plata

El Comedor Caritas de Sol ayuda a más de 100 familias en Altos de San Lorenzo. La fundadora es Andrea Paul, la mamá de Tatiana Vera, jugadora de vóley platense de mejor actualidad, quien tras consagrarse en el Tripero y en la Selección se fue a jugar a España.

Andrea Paul tiene 53 años, cuatro hijos y un enorme corazón. Nació y se creció en la zona del policlínico San Martín, pero desde hace más de 30 años se instaló en Altos de San Lorenzo. Allí fundó el Comedor Coritas de Sol, en donde además de brindar asistencia alimentaria, realiza un gran trabajo pedagógico y educativo con los chicos de la región en los tiempos de pandemia.

Allí hace una juegoteca, que es un espacio de contención para los chicos que van todas las semanas de 17 a 19, se entretienen y juegan aprendiendo con sus padres. Además, se llevan una suculenta merienda, que para muchos compensa la cena en 83 entre 22 y 23 de La Plata.

Andrea es la madre de Tatiana Vera, la mejor jugadora de vóley platense en la actualidad, que por su buen desempeño en Las Lobas formó parte de la Selección nacional denominada Las Panteras y fue convocada para seguir su carrera en España como deportista profesional.

Pese a ello, jamás perdió la humildad: “Es la misma chica que el colectivero que pasa por el barrio la recuerda cuando salía corriendo con el tiempo justo para ir a entrenar a la sede y se iba cambiando las ojotas por las zapatillas arriba del micro. Esa es Tati”, resumió Andrea, una verdadera vecina solidaria, que ya es referente en la zona Sur de La Plata, en donde a diario trabajan en una casa que está a pocos metros de su domicilio particular.

“Acá se ve el espíritu solidario del Lobo. Quiero agradecerles a todos los que ayudaron y ayudan siempre, trayendo alimentos y todo tipo de cosas que nos permiten a nosotros seguir haciendo este trabajo. Desde los jugadores, hasta las Casamiquela (madre e hija referentes del vóley del Lobo), pasando por exjugadores como Gabriel Pedrazzi o Pedro Troglio”, comentó la mujer, que además trabaja junto a su otra hija, quien tomó nota mientras se desarrolló la entrevista con este diario.

El Comedor Caritas de Sol está en 83 entre 22 y 23, y allí hace poco estuvieron los organizadores de la campaña “Dale Lobo”, también realizando un trabajo de contención social para todos los chicos más necesitados de la ciudad.

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