Sobrecarga de rumores…

Con un equipo diezmado, presuntamente por lesiones musculares en apenas cinco fechas del campeonato, Gimnasia se presentará esta tarde ante Colón en Santa Fe, en donde muchos estaban esperando la presencia de Luis Miguel Rodríguez.

El delantero que llegó al Lobo tras salir campeón con el Sabalero no tuvo la mejor salida del equipo santafesino, ya que hace menos de dos meses había dejado la concentración con el Sabalero para viajar a Tucumán, negociar con Atlético y luego terminar recalando en el Lobo. De allí que su imagen con el público del equipo campeón del fútbol argentino se fue deteriorando y hay quienes sospechaban que el partido de esta noche podría terminar siendo muy incómodo para el jugador, que finalmente ni siquiera decidió viajar a Santa Fe para acompañar a sus nuevos compañeros del Lobo.

¿Qué fue lo que pasó en el medio? ¿Por qué el Pulga pasó de ser titular a ni siquiera ir al banco de relevos y no viajar?

A priori, el argumento que esgrimieron ayer los técnicos Martini y Messera reflejó una situación límite del físico de Rodríguez, quien habría sufrido una “sobrecarga” muscular en los entrenamientos previos a enfrentar a su exequipo, Colón de Santa Fe.

Por un lado, la hipótesis de la “sobrecarga” deja muy expuesto al preparador físico del plantel del Lobo Ignacio Dahul, quien se encargó de monitorear la inserción de Rodríguez al plantel profesional a comienzos del julio cuando empezó la pretemporada: allí el jugador entrenó y a una semana del primer partido se desgarró. En ese momento diagnosticaron un mínimo de entre 21 a 28 días de recuperación, pero Rodríguez insistió con regresar antes al equipo: entró desde el banco de suplentes, debutó contra Central y fue titular contra Defensa y Justicia y Atlético Tucumán, pero no pudo completar los 90 minutos y se fue reemplazado.

Todo hacía indicar que empezaba a recuperar ritmo de competencia, cuando inesperadamente le llega este freno a menos de una semana de enfrentar a Argentinos Junios, a mediados de la semana que viene por la Copa Argentina. A ese compromiso, Rodríguez llegará con 10 días de inactividad, y varios meses sin completar dos encuentros seguidos sin salir, ya que la última vez fue con la camiseta de Colón en el semestre pasado.

La teoría de “preservarlo” para enfrentar al Bichito fue perdiendo fuerza ante la negativa de viajar a Santa Fe, ya que una buena excusa para cuidarse hubiera sido llevarlo al banco de relevos y usarlos al menos unos minutos en el segundo tiempo si el equipo lo necesitaba. Pero no. Así fue que trascendió la versión de que el futbolista habría pedido no jugar ante su exclub, cuidarse para enfrentar a Argentinos la semana que viene y de paso ahorrarse la incomodidad de verles las caras a los empleados y dirigentes del Sabalero esta tarde.

Claro que Gimnasia no contaba con otra lesión, la de Matías Pérez García, que al igual que Carbonero (o el propio Rodríguez) se desgarró en el primer mes de competencia y no podrá jugar.

Desde el entorno del presidente Gabriel Pellegrino ya venían sosteniendo la necesidad de hacer ajustes y reforzar la preparación física del equipo incluso desde el mes de mayo cuando el Lobo estaba en pleno receso. Ahora, a la luz de los hechos, la decisión de poner otro “ayudante” para Dahul o revisar el trabajo que se está haciendo en Estancia Chica estaría más que justificada.

Así está compuesto el cuerpo técnico de Gimnasia

Directores técnicos: Leandro Martini y Mariano Messera.

Preparador físico: Ignacio Dahul.

Preparador físico: Juan Cruz Lhomy.

Entrenador de arqueros: Hernán Erario.

Asistente de videos: Facundo Juárez.

Cuerpo médico: Pablo Del ­Compare y Flavio Tunessi.

Kinesiología: Jorge Murúa y Sebastián Leymarie.