Indiscreciones, el show que mostró los “trapitos sucios” de la farándula argentina

Bajo la conducción de Luis Avilés, el magazine estaba abocado a los chismeríos y escándalos del show business y sus estrellas.

En los primeros días de abril de 1990, el uruguayo Luis Avilés llegaba a la pantalla chica con un show diario de la primera tarde que trataría los chimentos e informaciones de primera línea inherentes a la farándula vernácula.

Romances, divorcios, infidelidades y escándalos eran los argumentos del show, que terminaba de completarse junto a la fallecida periodista Susana Fontana y un panel de figuras que comenzaban a popularizarse como Marcela Tauro, Jorge Ricardo Rial, Adriana Salgueiro, Marcelo “Teto” Medina, Susana Roccalsavo, Alejandra Rubio, Marcelo Polino, Alejandra Pradón, Marixa Balli, Marcela Berbaris, Marisal Brel, Raquel Mancini y Daniel Gómez Rinaldi, entre otros.

Vale mencionar que, cuando el conductor de Intrusos salió del programa, escribió un libro donde contaba intimidades de Avilés, lo que generó una rispidez eterna entre ellos.

El magazine, abocado a la vida privada de los artistas, consolidó una manera de hacer televisión que también sentó precedentes para lo que serían programas como Intrusos en el espectáculo o Los ángeles de la mañana..

Con rigidez y profesionalismo, el jurista exigía que los panelistas llegaran con anticipación al estudio de televisión. Cada uno tenía que exponer cuál era la información jugosa que revelaría durante la emisión y allí se ponían en común entre todos para no pisarse, contradecirse ni hacer desprolijidades.

Como todo éxito, la fórmula quedó instalada. Sin embargo, el paso del tiempo hizo que los contenidos fueran cambiando, como también las elecciones de las personas a la hora de consumir entretenimiento. Además, la vorágine misma generó que cambiaran las conductas de los televidentes, que ya no se encontraban disponibles por tener que trabajar o ausentarse de sus casas. El prime time comenzó a tener una exclusividad por la noche o los fines de semana y la llegada de la televisión por cable presentó otras opciones para los momentos de ocio.

Al llegar al final del ciclo, los periodistas buscaron sus rumbos por otros lares, mientras que Lucho Avilés estuvo al frente de programas de interés general. Asimismo, años después, Indiscreciones tuvo un revival por una señal alternativa que contó con la presencia del uruguayo y de Susana Fontana, pero sucedió sin pena ni gloria.

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