Kevin Costner: una vida dentro y fuera del cine

Reconocido como galán e intérprete del séptimo arte, Kevin Costner cumplió 67 y demostró que está más activo que nunca. Sucede que, además de sus roles como actor, también se desempeña como cantante y director dándose la chance de escribir una serie que tuvo un relevante éxito en la pantalla chica. Además logró establecer una serie de inventos como unas máquinas centrifugadoras que protegieron a zonas estadounidenses estalladas por la explosión de un pozo petrolífero.

No todo siempre fueron las luces de la fama ni los trabajos en los sets de filmación. En su primera juventud, Kevin logró ingresar a la universidad estatal de California para cursar los estudios en Administración y Dirección de Empresas. Una vez que estaba adentrado en este oficio, inició trabajos en las áreas de marketing y comercio en empresas locales.

En 1994, Kevin mantuvo dos encuentros fortuitos con el galán de cine, Richard Burton, reconocido por su rol en Cleopatra, entre otros. Esto sucedió cuando ambos coincidieron en un vuelo y allí entablaron una charla, e intercambiaron datos personales convirtiéndose en amigos.

Por aquel entonces, el hombre afamado le dio un consejo a Costner que tomaría al pie de la letra: “Para ser felices debemos luchar por nuestros sueños”. Con este eje, Costner se dio cuenta de que tenía una fuerte sed por abocarse a la interpretación y así fue que hizo sus maletas para mudarse a Hollywood, donde comenzó a ejercer la actuación.

En esos momentos, debió emplearse en otras aristas y no tuvo pruritos en oficiar como guía turístico, pescador en la semana y hasta condujo camiones de transporte y logística. Asimismo esta espera y el esfuerzo valieron la pena, puesto que logró llegar a protagonizar roles que le valieron la popularidad inmediata como sucedió en la cinta de Eliot Ness llamada Los intocables, en Caso abierto y en la célebre El guardaespaldas junto a la fallecida cantante Whitney Houston.

Con el transcurso de los años, la actuación tuvo sus frutos y Kevin decidió probar suerte en la dirección cinematográfica. Así fue que puso manos a la obra para encontrar un guión que lo sedujera y encontró un libreto titulado Danza con lobos que lo llevó al set de filmación, logrando menciones y galardones como también acrecentando su patrimonio.

A la par de su exitosa carrera, el hombre comenzó a militar en las aristas ambientales, investigó e invirtió en una empresa de centrifugadoras para trabajar en la separación del petróleo de agua.

Luego de dar a conocer una serie para la que trabajó y por la que debió viajar en una gira promocional por el Viejo Continente, el actor recibió el cariño de la gente y quiso ir por más. Formó entonces su banda, Kevin Costner & Modern West, que hasta el presente lleva publicados cuatro trabajos discográficos.