The Crowded Room, una entrega prometedora
La producción audiovisual trata un caso real. Asimismo, ya está dando para hablar por su realismo y autenticidad.
La escena está que arde con la cantidad de propuestas en el formato de serie que están llegando al universo digital, y The Crowded Room es una de las mejores recepcionadas por la crítica.
Para esta ocasión, los productores ejecutivos eligieron el relato basado en William Milligan, que tenía veintidós años cuando ocurrieron los hechos, en los años setenta. Sucede que fue arrestado por secuestrar y asesinar a tres mujeres en una universidad de Ohio. Al ser llamado a indagatoria, el chico comenzó a citar a dos personas por los hechos delictivos: un hombre llamado Rage, que era el que ocasionaba los robos, y a una mujer, Aldana, que lo acompañaba y era la ideadora de los abusos sexuales que sufrieron las víctimas.
Con el correr de los meses, el equipo médico que atendió al hombre determinó que se trataba de un paciente con personalidades múltiples, que habrían surgido a raíz de un abuso sexual que sufrió siendo apenas un infante por parte de su padrastro.
A fines del 1978, la corte determinó que se trataba de un paciente psiquiátrico y fue absuelto de los cargos. Esta decisión generó un sinfín de controversias en Estados Unidos.
La serie es protagonizada por Tom Holland, que debió personificarse como el asesino en serie y debió someterse a una dieta estricta para poder llevar el rol.
Estos fueron los hechos de público conocimiento, sin embargo, el guionista Akiva Goldsman decidió que quería darle una vuelta de tuerca a la historia, que si bien tiene todos los ingredientes del caso real, buscó no caer en lugares comunes, siendo que ya todos conocen lo que fue ese caso en los años setenta. Además, Netflix decidió incluirlo en un especial sobre asesinos en serie, en el que detallan todos los acontecimientos y sus pruebas forenses.
De esta manera, el escritor decidió darle varios giros a la historia oficial y además tomó datos que no son reales ni figuran en los antecedentes policiales que dejó este caso. Estas herramientas las ha utilizado en otros momentos, como en sus otros trabajos de primera línea tales como Una mente maravillosa, Soy leyenda o Yo, robot.
Por su parte, el criminal fue ingresado en un hospital para dementes debido a que fue considerado inocente por los crímenes que se le endilgaron. Así, realizó su tratamiento y escapó entrados los años ochenta. Luego fue en búsqueda de una nueva vida y decidió empezar desde cero en Washington, donde se asentó, encontró un trabajo y cambió su identidad para comenzar a llamarse Christopher Carr. Por otro lado, dejó enseguida su departamento nuevo, que compartía junto a un amigo que desapareció misteriosamente. En este sentido, Carr fue encontrado sospechoso, pero nada se supo sobre el paradero de su amigo.
Luego de dos años, el hombre fue detenido cuando se encontraba en el estado de Florida y fue llevado nuevamente a Ohio, al hospital del que nunca debió salir. Por ese entonces, por su desempeño en las tareas que le dieron y su buen comportamiento, fue puesto en libertad condicional con la supervisión de un grupo de agentes que velaban por su conducta. Esto sucedió porque los expertos que lo atendieron desde su primera detención consideraron que, gracias a la terapia, sus identidades múltiples habían quedado agrupadas en una sola, por lo que el hombre podía ser reinsertado en la sociedad.
Ya con el cambio de década, es decir en los años noventa, Billy, como lo apodaron sus amigos, dejó de ir a los controles médicos porque consideraba que estaba en instancias de poder desempeñarse libremente.
En el cambio de milenio, el hombre fue internado debido a que atravesaba una enfermedad terminal, y murió en un hospital a los 54 años.
En la versión de The Crowded Room, el actor Holland se pone en la piel de Danny Sullivan, que está inspirado en Milligan. Sin embargo, en esta entrega él es arrestado por un tiroteo en el que estuvo implicado, en pleno corazón de Nueva York, y que dejó dos personas fallecidas. Allí es arrestado, y en los interrogatorios se devela que tiene serios problemas emocionales y de atención.
El elenco termina por completarse con Amanda Seyfried, Sasha Lane, Will Chase, y Emmy Rossum (Shameless), entre otros.