Xuxa, una enamorada de Argentina
En un repaso histórico por los ciclos, personajes y figuras que marcaron un momento de la TV nacional, diario Hoy recuerda el show infantil de la conductora brasileña.
Nacida en Brasil, Xuxa dio sus primeros pasos como actriz de películas independientes, pero también como modelo de alta costura en su ciudad natal. Poco a poco, por su cariño y dulzura, la mujer conquistó el corazón de todas las generaciones debido a la incursión en un segmento infantil que cambiaría su vida, incluso la de todos nosotros.
A causa del éxito rotundo de la entrega, productores de Latinoamérica comenzaron a verse interesados por el contenido y quisieron que se replicara en otros países. El primero en notar este tesoro fue el responsable de contenidos Gustavo Yankelevich, que supo ser el líder indiscutido del canal Telefe. Allí le propuso a la mujer que viniera a hacer el programa para luego marcar tendencia con un programa infantil que quedó plasmado en la memoria colectiva.
De esta manera, en 1991, en plena época de globalización, sushi con champagne y la gestión de Carlos Saúl Menem en el poder, “la reina de los bajitos”, como fue bautizada, comenzaba su idilio con el suelo argentino. Han pasado más de tres décadas desde que desembarcó en Argentina con un show que contenía una tecnología prometedora por ese entonces, debido a que, al inicio del programa, la artista bajaba de una nave espacial que la dejaba en el set de filmación. Asimismo, era acompañada por “las paquitas”, un grupo de bailarinas que la cortejaban en todas las actividades del ciclo. Con un tono simpático, la mujer solía confundirse entre su idioma natal y el castellano, generando divertidos momentos y chistes. También había animaciones, pasos de baile y presentación de dibujos que acompañaban a grandes y chicos en el regreso a casa.
El éxito también se propagó al merchandising que fue creado con las imágenes de la diva para dar entidad a posters, remeras, pulseras, casetes, discos y ropa con los colores y su impronta. También era invitada a todos los programas del momento, en especial a los shows culturales que realizaba Marcelo Tinelli. Ambas estrellas de la pantalla chica supieron construir una intensa amistad que perdura hasta nuestros días.
La rubia platinada se vestía como una princesa, enseñaba mensajes de amor hacia las otras personas, el cuidado del prójimo y el respeto por la otredad. También le cantaba a la naturaleza, enviaba mensajes de contención y conciencia. Por otro lado, marcaba las buenas costumbres para la salud con la higiene bucal, el cuerpo, entre otros.
Entre los romances más resonantes que la diva mantuvo en su vida se encuentra el amorío con el fallecido futbolista Pelé. Luego con el automovilista Ayrton Senna. Siempre sostuvo un perfil muy bajo con su vida secreta e incluso así lo continuó hasta la actualidad. Hoy se dedica a ser una empresaria exitosa, debido a que tiene una cadena de negocios abocados a la cosmética y salones de eventos infantiles bautizados como X. También, poco a poco, sostuvo que es mejor la honestidad y es por ello que suele hacer fuertes declaraciones en las redes sociales inherentes al universo digital.
Una leyenda viva
La “reina de los bajitos” llegó a Argentina para hacer una carrera profesional que sentó precedente. Tiempo después, otras mujeres de la farándula comenzarían a tener inquietudes frente a las cámaras para luego abocarse a las conducciones de programas infantiles.
Teniendo como líder a la diva brasileña, modelos y vedettes de la farándula vernácula tuvieron sus propias entregas, tal como lo hicieron las actuales conductoras y cantantes Panam, Flavia Palmiero, Lourdes Sánchez, Nazarena Vélez, entre otras. Por su parte, Florencia Bertotti también siguió un recorrido como animadora infantil.
La familia como tesoro
A lo largo de su carrera, Xuxa pudo cumplir su sueño de convertirse en mamá junto a un empresario llamado Luciano. Luego de un tiempo en pareja, pudieron llamar a la cigüeña y juntos recibieron a Sasha, una joven que hoy está estudiando moda y economía en la universidad mientras acompaña a su mamá en la empresa familiar.
De esta manera da sus primeros pasos como trabajadora y cuida la fortuna que supieron construir gracias a muchos años de éxito. Por otro lado, tienen pensado invertir en Estados Unidos en una línea textil que rememore las mejores imágenes de Xuxa durante la década de los 90.