Así avanza el mural identitario en la Facultad de Ciencias Exactas

El proyecto propone la realización de una obra de 100 metros cuadrados. Se realiza en el predio de 115 y 47 con las técnicas de mosaico y pintura, de manera colectiva. Diario Hoy dialogó con los artistas a cargo de la iniciativa, que consta de siete etapas.

Un mural como construcción colectiva de identidad institucional y un equipo de artistas que fue convocado para darle vida a una obra que refleje el trabajo, la historia, los logros y las luchas de la comunidad de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP. Eso es lo que involucra esta iniciativa.

“Lo primero que hicimos fue convocar a la comunidad de la Facultad: docentes, no docentes, estudiantes y autoridades, además de quienes quieran participar en general. La idea era que nos cuenten un poco sobre determinados temas específicos que, nosotros entendíamos, tenían que ver con las actividades principales y la identidad de la Facultad, en orden también de realizar un recorte temático sobre lo que íbamos a trabajar”, le contó a diario Hoy Alejandro Villella, uno de los muralistas a cargo del proyecto dirigido por la reconocida artista Cristina Terzaghi.

“Propusimos una actividad. La gente a partir de la consigna que les dábamos nos daba una idea de cuáles eran los temas más importantes a tocar dentro del mural, y a partir de eso les pedíamos imágenes. Con esas imágenes fuimos armando el boceto”, detalló Villella, quien además es docente de Artes Plásticas.

La comunidad de la Facultad reflexionó en torno a diferentes tópicos, entre ellos, por ejemplo, la historia de la casa de estudios, su identidad, sus luchas y su accionar desde las cátedras y hacia la comunidad.

Tras la realización del boceto por parte del grupo, las devoluciones sobre el mismo y el visto bueno de las autoridades, comenzaron los talleres destinados a la comunidad educativa, donde desde el equipo se les enseñó la técnica para trabajar.

“Los invitamos a laburar técnicamente, que compartan con nosotros el taller, que aprendan la técnica del trabajo en mosaico y que nos ayuden a construir las imágenes. Es otra instancia más participativa, con la cual pretendemos que la comunidad también se involucre con la imagen. Y esto tiene que ver también con nuestra idea de qué es el arte público y para qué sirve, cuáles son sus propósitos ideológicos y políticos. Y para nosotros siempre el arte público es y debe ser algo comunitario, porque también hace a la valoración de la obra”, detalló.

Técnica

“Las técnicas que elegimos son las de mosaico y pintura. La de mosaico es una técnica que tiene muchísima durabilidad en el tiempo, pero que además permite realizar un mural de forma colectiva y participativa”, remarcó la artista visual Victoria Gorgojo, quien además coordina el programa de murales “Ellas no estaban pintadas” del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires.

Finalización

“Nosotros hacemos una proyección en el tiempo de cuánto tardaríamos aproximadamente. Este mural lo dividimos por siete fragmentos, calculamos los tiempos para cada uno de los fragmentos, entre lo que sería la realización de la parte práctica del taller de mosaico, y luego la instalación y la realización de la pintura. Obviamente estos tiempos son aproximados porque, al ser un mural en el exterior, dependemos mucho de las cuestiones climáticas; y al contar con talleres participativos, los tiempos van a depender de la participación que haya”, sostuvo la artista.

El equipo también está conformado por Carolina Cadelli, artesana, ceramista y estudiante avanzada de la Licenciatura en Muralismo; Daniela Anzoategui, docente en Artes Plásticas con orientación en Muralismo y Arte Público; y Verónica Galli, profesora en Artes Plásticas con orientación en Escenografía y en Muralismo.

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