salud y bienestar
Cómo descansar bien y no sufrir insomnio
Quien no duerme bien lo sabe: recuperarse después de una mala noche no es tarea sencilla.
El insomnio ha sido durante la pandemia de Covid, que ya lleva casi dos años, un fiel aliado de miles de personas en todo el mundo; algo con lo que han tenido que aprender a convivir de mala gana.
Quien no duerme bien lo sabe: recuperarse después de una mala noche no es tarea sencilla. Sin embargo, para quienes creían que con una noche reparadora el problema estaba resuelto, hay malas noticias: los efectos del déficit del sueño pueden permanecer más de lo pensado.
Según un nuevo estudio publicado en la revista Plos One, las consecuencias de un mal descanso podrían durar hasta una semana después. El estudio demuestra que después de 7 días en que los participantes se equilibraban de un período de 10 días de sueño deficiente, habían recuperado su velocidad de reacción pero no el resto de las medidas de función.
La deficiencia del sueño tiene un impacto negativo en el funcionamiento humano. Está asociado con déficits en la atención y la memoria, así como con un mayor riesgo de accidentes automovilísticos, problemas cardíacos y otros inconvenientes médicos.
Algunas recomendaciones de los especialistas, para tener un buen descanso, son mantener una rutina regular. Según aconseja la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos, tanto despertarse todos los días a la misma hora como dormir en el mismo horario, ayuda notablemente a mejorar el descanso. Además realizar actividad física durante el día ayudaría al cuerpo a descansar más profundamente a la noche; también usar un “ruido blanco” para evitar despertarse, por ejemplo el sonido de un ventilador o la misma canción que se repita toda la noche, y mantener la oscuridad de la habitación o usar antifaces o tapones para los oídos.