Crecen las quejas por la aparición de clavos y tachuelas sobre 7 entre 72 y plaza Rocha
Es un tramo de la avenida en la que se multiplicaron las pinchaduras de las ruedas de autos, motos y bicicletas que transitan hacia el centro y llegan a plaza Rocha en llanta.
Desde que arrancó el mes de marzo, en sintonía con la vuelta de las clases, se incrementó notoriamente la circulación de autos, motos y bicicletas por las calles y avenidas de la ciudad.
Los colectivos viajan llenos con pasajeros parados en horas pico y en algunos casos ya ni frenan en las principales avenidas del casco urbano. Sin embargo, una recurrente queja de los vecinos dejó en evidencia lo que podría derivar en una investigación por oficio de una fiscalía de La Plata, por la repetitiva aparición de clavos y tachuelas en el tramo de la avenida 7 que afecta a los conductores que vienen circulando desde 72 hacia la zona del centro. En tal sentido, se llegó a comprobar que muchas motos y autos suelen pinchar hasta dos y tres veces por semana sus ruedas recorriendo la 7 desde 72 (que marca el ingreso al casco urbano desde la localidad de Villa Elvira) hasta la zona de plaza España en el cruce con la 66. De esta manera, al seguir transitando por la 7 en dirección hacia el centro, muchos autos y motos llegan prácticamente en “llanta” a la zona de plaza Rocha.
“Deberían poner más controles a la noche porque andan tirando clavos en la zona”, expresó enojada una de las conductoras de una camioneta que hace repartos de comida en la zona del centro y a diario transita por la avenida 7 en la parte sur del casco urbano.
El problema afecta principalmente a las personas que van desde Villa Elvira hacia la zona del centro, a diferencia del carril de circulación de la misma avenida por el que transitan los autos que van desde el centro hacia las afueras de la ciudad.
Si bien se han tejido teorías sobre las razones por las cuales aparecen clavos y tachuelas en las inmediaciones de plaza Rocha, la realidad es que se ha convertido en una queja común de muchas personas que terminaron comentando el problema, casi a modo de broma, pero al mismo tiempo con la impotencia que significa tener que frenarse y parar entre 20 minutos y media hora para arreglar una rueda o pagar un parche que no baja de los 5.000 pesos en el medio de una rutina de trabajo.
Hoy se estima que una cámara de cubierta para una moto cuesta 10.000 pesos con el arreglo, pero en la zona de plaza Rocha les piden a los dueños de las motos que sean ellos los que terminen sacando la rueda del vehículo prestando las herramientas.