Embarazada de siete meses sufrió un calvario por desbordes cloacales

Es una joven que vive en calle 122 entre 71 y 72 con su pareja. En la esquina de 72 hay un enorme desborde en la vía pública que genera mal olor y afecta el interior de las casas.

En verano o en invierno, las quejas por el servicio de la empresa ABSA en la región se siguen incrementando en distintos barrios de La Plata, donde muchas veces, por el crecimiento edilicio ante la construcción de edificios, las cloacas terminan rebalsando por la gran demanda de consumo y los vecinos de casas particulares resultan los más damnificados. Esto es lo que ocurrió en una casa de 122 entre 71 y 72, en donde los vecinos sufren las consecuencias en el interior de las viviendas por un desborde que está en la esquina, en la vía pública y a la vista de todos.

“Mi novia embarazada de siete meses tiene que estar sacando el agua desde el baño. Me sale la alcantarilla desde el patio hacia el baño”, reveló una de las personas consultadas en el lugar.

Pegado a un despacho de pan de la cuadra, sobre la avenida 122 del lado de La Plata, la joven embarazada de siete meses se tiene que sostener de las paredes para ingresar a su casa, ya que el agua brota con mucha fuerza desde un patio interno de la propiedad y sale con la fuerza de un arroyo hacia la vereda y desemboca en la calle.

La mujer, quien pidió mantener su identidad en reserva, recibió el apoyo y la solidaridad de otros vecinos como Hugo, que a metros del ingreso a este domicilio aclaró que hace varias semanas la situación viene afectando a los vecinos de la avenida 122.

“Hace 60 años que vivo en el barrio y esto nunca pasó. El agua sale por el desborde que está en la esquina. A la vecina le pierde agua adentro de la casa y tiene siete meses de embarazo. Pero acá no solo es el agua, sino que tampoco hay luminarias públicas. Los desagües están mal hechos”, comentó Hugo.

Al no tener lugar por donde desagotar el agua, y estar tapadas las cañerías, los mismos desechos que deberían irse por las cloacas terminan saliendo por las rejillas de los baños y las piletas de las casas de varias viviendas que están sobre la avenida 122.

Una situación similar se presenta en calle 519 entre 2 bis y 3 de Ringuelet, donde en el verano escasea el agua y en el invierno se rebalsan las cloacas.

Acudieron al pedido

Tras un informe emitido en Red 92, ayer por la tarde un camión se acercó a la zona procurando brindar una solución a la vivienda que está pegada al despacho de pan de la avenida 122, donde, además, la familia le da resguardo a un perro abandonado de la cuadra por las noches.

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