ciencia
Encuentran un zapato de hace 3.100 años en medio del derretimiento de hielo en Noruega
También hallaron otros artefactos de la Edad del Bronce
El zapato más antiguo de Noruega, un botín de 3.000 años de antigüedad de la Edad del Bronce, fue hallado junto a miles de otros artefactos antiguos entre los parches de hielo de las montañas que se derritieron en el país en las últimas dos décadas, según un nuevo informe de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU).
Los objetos encontrados en territorio noruego se encuentran en un estado de conservación impecable, sin descomposición o deformación. A su vez, los expertos remarcaron que ahora el cambio climático podría terminar con el sueño de seguir encontrando más tesoros históricos en buen estado.
“Un estudio basado en imágenes de satélite tomadas en 2020 muestra que más del 40% de 10 parches de hielo seleccionados con hallazgos conocidos se han derretido”, expresó en un comunicado la coautora del informe Birgitte Skar, arqueóloga y profesora asociada del Museo de la Universidad NTNU.
“Estas cifras sugieren una importante amenaza para la conservación de los descubrimientos del hielo, por no hablar del hielo como archivo climático”, precisó.
Al mismo tiempo, el cambio climático brinda enormes posibilidades para los científicos. “Estamos comenzando a evaluar si el hielo en algunos lugares podría haber sobrevivido al período cálido que siguió a la última glaciación, lo que significaría que la capa inferior del hielo podría ser remanente de la capa de hielo de ese período. Esta posibilidad ofrece oportunidades sin precedentes para rastrear la historia climática y la actividad de cazadores en estas tierras incluso más atrás en el tiempo”, resaltó Skar.
En cuanto al pequeño zapato de cuero que, por la apariencia, pertenecía a una mujer o a un adolescente, fue hallado en 2007 en las montañas de Jotunheimen, y data de alrededor de 1100 a. C.
“Se han encontrado objetos, restos de animales y actividad humana que ni siquiera sabíamos que existían. Se trata de todo, desde arreos y ropa para caballos hasta flechas con puntas hechas de conchas, astas de madera y plumas. No pasa un año sin hallazgos sorprendentes que cambien los límites de nuestra comprensión”, sostuvo la arqueóloga.