Los rituales menos conocidos para recibir al Año Nuevo en América Latina

En las distintas regiones del planeta se pueden encontrar distintas tradiciones o rituales, propios de la cultura de esos lugares, para celebrar la llegada del año nuevo y despedir el año viejo. 

Algunas de estas costumbres son muy conocidas, como las famosas 12 uvas que hay que tragar una por cada campanada a las doce de la noche mientras pides un deseo. También están los que suelen guardar un billete en el bolsillo o poner una moneda en el zapato para que no falte el dinero en el año entrante.

Hay otras tradiciones menos conocidas que se realizan en los países para atraer la prosperidad y la fortuna en el año entrante.

En Uruguay se celebra "el baldazo", que es tirar un balde lleno de agua por la ventana hacia la calle. Se dice que esta tradición ahuyenta las penas del año que se termina y le da la bienvenida a uno lleno de prosperidad.  

En Cuba se hace algo similar llamado "el cubazo", que al igual que en Uruguay, consiste en lanzar un balde de agua por ventanas y balcones para limpiar las malas energías y llenar de vitalidad a las personas.

Una variante puede ser la de tirar papeles o calendarios viejos, como un símbolo de deshacerse de todo lo viejo para hacerle espacio a los nuevos objetos que vendrán con el año nuevo, algo parecido a lo que hacen los italianos al lanzar objetos antiguos de los balcones de sus casas.

En muchos países de Latinoamerica se procede a quemar un muñeco o monigote hecho de materiales inflamables, como papel, aserrín y ropa vieja, una práctica que se extiende a Nicaragua (donde se le llama "El viejo"), Colombia, Perú, México y algunas zonas de Venezuela y Argentina.

En algunos países de Centroamérica se acostumbra a cascar un huevo y ponerlo en un vaso con agua. Hay quienes lo dejan toda la noche del 31 de diciembre a la intemperie. Se dice que la forma que adopte el huevo será lo que depara el nuevo año.