Se vienen seis meses clave para el futuro de la Feria Franca: los quieren sacar y resisten

En el tramo final del mes de mayo, y ante la inminente llegada de junio con el inicio de la segunda mitad del año, los feriantes y vecinos de Barrio Norte reconocen que se vienen seis meses de definiciones para la escenografía de una de las principales avenidas del Casco Urbano: la 38.

De acuerdo a un proyecto impulsado por el área de planeamiento de la comuna platense, en la parte final del 2023 todas las ferias que venden frutas, verduras u otro tipo de alimentos deberán ser reubicadas en un predio en las afueras de La Plata. Esta situación podría atentar contra la recaudación de los feriantes y, en cierta forma, podría alterar las costumbres de los vecinos de Barrio Norte, quienes desde 1956 (hace 67 años) ven los puestos sobre la rambla de 38 entre 9 y 11.

El debate

Por un lado, nunca faltaron algunas personas que se quejaban por el estado en el que queda la rambla y parte de la avenida los domingos y los jueves a partir de la tarde, cuando se retiraban los puestos después de la jornada de venta. Incluso, algunas de las personas que formaron parte del ejecutivo municipal entre 2015 y 2019 habían denunciado en varias ocasiones a los feriantes por ruidos molestos. Sin embargo, desde la comisión de feriantes se mostraron siempre dispuestos a organizarse para evitar tener una relación de tensión con aquellas personas que no están de acuerdo con los puestos en una zona que históricamente fue transitada, pero que en los últimos veinte años se vieron cada vez más autos en el tramo de la rambla por donde pasan los autos, dado al crecimiento demográfico.

De allí que surgieron dos posturas: algunos funcionarios del gobierno municipal, como la Secretaría de Planeamiento, se muestran proclives al traslado de las ferias a las afueras de La Plata, mientras que otros concejales del Frente de Todos quieren que sigan funcionando en la rambla de 38, como así también en la zona de 51 y 22, cerca del Parque San Martín, en diagonal 73, en barrio El Mondongo o en Barrio Hipódromo, a tal punto que lanzaron un proyecto de ordenanza.

En el mes de octubre, dos meses antes de la finalización del año 2023, se cumplirán 130 años del surgimiento de los primeros puestos de venta de frutas y verduras en la región. En esa fecha se buscará aprobar el proyecto para declarar a la Feria Franca como patrimonio cultural de la ciudad de La Plata, alegando la cantidad de años que llevan en la ciudad.

En el caso de que esto finalmente se apruebe con el consenso de los ediles en el Concejo Deliberante, se convertiría en el principal resguardo o paraguas protector para evitar el traslado a otros lugares.

Como contrapunto, en las últimas dos semanas aparecieron dos enormes contenedores para poner basura sobre la rambla de 38 en la misma zona donde funciona la feria los jueves y los domingos, en una clara señal de disconformidad por los residuos o bolsas que dejan los feriantes después de vender. El gesto fue tomado como una declaración de “guerra” o mojada de oreja para algunos comerciantes que sintieron que los trataron de “sucios” porque les pusieron contenedores justo frente a donde se ponen a vender.

La disputa está instalada y, durante la segunda mitad del año, se definirá el futuro de los puestos en los lugares originales y en otros a los que los feriantes se resisten a ser trasladados.