Armenia denunció nuevos bombardeos azeríes
La acusación armenia se produjo el mismo día en que la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, sostuvo en Ginebra que “la ley humanitaria internacional es muy clara: ataques realizados en violación del principio de proporcionalidad podrían ser crímenes de guerra”.
En medio de la escalada del conflicto entre Azerbaiyán y Armenia por la región separatista de Nagorno Karabaj, el gobierno armenio acusó ayer al Ejército azerbaiyano de bombardear su territorio, matar a un civil y herir a dos personas, mientras la ONU advirtió que existe la posibilidad de que se hayan cometido crímenes de guerra debido a ataques “indiscriminados” contra la poblacón.
“Hoy la parte azerbaiyana hizo disparos de artillería contra posiciones de las fuerzas armadas armenias y la localidad de Davit Bek”, escribió en Twitter la vocera del Ministerio de Defensa armenio, Chouchan Stepanian, citada por la agencia de noticias AFP.
Davit Bek se sitúa a un kilómetro de la frontera entre Armenia y Nagorno Karabaj, que la comunidad internacional reconoce como parte de Azerbaiyán.
La acusación armenia se produjo el mismo día en que la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, sostuvo en Ginebra que “la ley humanitaria internacional es muy clara: ataques realizados en violación del principio de proporcionalidad podrían ser crímenes de guerra”.
“Las partes tienen por obligación investigar este tipo de violaciones de manera eficaz, rápida, detallada e imparcial y los responsables, juzgados”, subrayó.
En la misma línea, la representante de la ONU denunció el uso “por ambas partes” de municiones dotadas de submuniciones, en general muy peligrosas para la población civil.
En el documento, también se mencionan videos que muestran la ejecución de dos soldados armenios uniformados por parte de tropas azerbaiyanas y se destaca que su autenticidad fue probada “por investigaciones profundas de los medios”.
“Según la ley humanitaria internacional, matar voluntariamente a personas protegidas es una grave violación de la convención de Ginebra y es, por lo tanto, un crimen de guerra”, subrayó Bachelet.