El Papa pidió a Occidente cambiar su “estilo de vida irresponsable”
En un escrito de fuerte impronta, el Papa Francisco criticó a los negacionistas del cambio climático y rechazó que se culpabilice a los pobres por el calentamiento global.
A través de un nuevo y fuerte escrito, el Papa Francisco pidió que Occidente cambie su “estilo de vida irresponsable” para frenar lo que considera una “crisis climática”, que es responsabilidad del ser humano. Asimismo, criticó a los negacionistas del cambio climático y rechazó que se culpabilice a los pobres por el calentamiento global. “Un ser humano que pretende ocupar el lugar de Dios se convierte en el peor peligro para sí mismo”, plantea el pontífice en la última frase de su exhortación apostólica “Laudate Deum”.
Francisco sostiene la necesidad de volver a llamar la atención en materia ambiental, a causa de la aceleración de sucesos como el aumento de las temperaturas terrestres provocado por la acción del ser humano y la falta de resultados de las cumbres dedicadas a frenar estas tendencias. “Ya no podemos dudar de que la razón de la inusual velocidad de estos peligrosos cambios es un hecho inocultable: las enormes novedades que tienen que ver con la desbocada intervención humana sobre la naturaleza en los dos últimos siglos”, expresa en la exhortación.
La responsabilidad del calentamiento global, para Francisco, resulta clara cuando expone que “ya no se puede dudar del origen humano - antrópico- del cambio climático”. En un contexto en el que “es indudable que el impacto del cambio climático perjudicará de modo creciente las vidas y las familias de muchas personas”, Francisco considera que algunas de sus consecuencias ya son “irreversibles” al menos por cientos de años, aunque cree que aún hay margen para que la humanidad frene antes del abismo climático.
La exhortación se publicó este miércoles en ocasión del día que de San Francisco de Asís, una figura vinculada en la Iglesia al amor por la tierra y los animales, que ya había inspirado al Papa para los títulos de la Laudato si y de su encíclica de 2020 Fratelli Tutti, y de la que Bergoglio se vuelva a valer para dar el nombre al escrito de este miércoles. En el escrito, el Papa reconoce por un lado la importancia de las pequeñas acciones, aunque advierte que “las soluciones más efectivas no vendrán sólo de esfuerzos individuales, sino ante todo de las grandes decisiones en la política nacional e internacional”.