Europa se aferra a las restricciones contra la Covid-19

La segunda ola de contagios obligó a las autoridades a reforzar las medidas con el fin de aplanar la curva de infectados.

La evolución del coronavirus en Europa se volvió un denominador común a lo largo del Viejo Continente. La segunda ola de contagios se propagó por los distintos territorios y generó preocupación no solo en la comunidad científica y civil, sino también en las autoridades, que decidieron aumentar las restricciones para intentar aplanar la curva de contagios.

Mediante una conferencia de prensa, el director de la sección Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge, se mostró muy preocupado por el rebrote del virus y aseguró que, así como “el número de casos diarios aumenta, los ingresos en los hospitales también”.

En este sentido, Kluge advirtió: “La Covid-19 es ya la quinta causa de muerte y se ha alcanzado el nivel de 1.000 muertos por día”.

Así como el gobierno francés aprobó un toque de queda nocturno en París y el resto de las regiones con alta tasa de infección, Alemania, Reino Unido, España, Rusia, Irlanda y hasta el mismísimo Vaticano reforzaron las medidas frente a la segunda ola de contagios.

Por su parte, las autoridades alemanas limitaron el acceso a actos privados en aquellas localidades que acumulen más de 35 nuevos casos por cada 100.000 habitantes dentro de un rango de siete días.

Asimismo, Reino Unido e Irlanda del Norte procedieron a cerrar bares, restaurantes y restringieron la venta de alcohol en comercios a partir de las 20 horas.

Del otro lado de la frontera, las autoridades irlandesas prohibieron las visitas privadas y aumentaron las restricciones en las zonas aledañas a su vecino del norte.

Además de la prohibición de circulación dispuesta en distintas localidades españolas y el cierre de comercios catalanes, las 286 muertes registradas en Rusia en las últimas 24 horas llevaron al Kremlin a cerrar bares y disponer del ingreso a comercios a partir de la identificación personal mediante el escaneo de un código QR.
Por último, cabe destacar las medidas de la Santa Sede. Si bien durante las últimas semanas se había visto al Papa Francisco en contacto estrecho con sus fieles, el aumento de casos y la detección de infectados en el Vaticano lo llevó a respetar las directrices de las autoridades referidas al distanciamiento social.

Noticias Relacionadas