Giorgia Meloni consiguió el apoyo de los diputados en Italia y consolida su gobierno

El gobierno italiano de Giorgia Meloni va ordenando las fichas y dio un paso muy importante para lo que será su futuro, si es que quiere sostener los cinco años de gestión que le quedan por delante.

Así, consiguió ayer el apoyo de la Cámara de Diputados luego de exponer los ejes programáticos de su Gobierno con un discurso de más de una hora en el que afirmó que continuará siendo un “socio confiable” en la Unión Europea y en la OTAN, y marcó como “prioridad” disponer medidas para atenuar el alza del precio de la energía y hacer una reforma constitucional en sentido presidencialista. Ahora, deberá pasar la prueba en el Senado.

Vale recordar que Meloni es la primera mujer en gobernar Italia en toda su historia y llegó al puesto como parte de una coalición entre Hermanos de Italia (ultraderecha), la Liga y Fuerza Italia (ambas de derecha). En su paso por Diputados, obtuvo 235 votos a favor, 154 en contra y cinco abstenciones para obtener el aval legislativo requerido por la Constitución.

“Esta es una gran responsabilidad en momentos fundamentales de nuestra democracia”, planteó Meloni. Asimismo, marcó la “responsabilidad frente a todas las mujeres que tienen dificultades para que se vea su sacrificio cotidiano y a las que hicieron con su sacrificio la escalera para que yo hoy pueda subir y romper el pesado techo de cristal”.

Luego agradeció “al pueblo italiano, único titular de la soberanía”, al tiempo que aseguró que el suyo “es un gobierno político plenamente representativo de la voluntad popular”.

“Estamos convencidos de que Italia necesita una reforma constitucional en sentido presidencial, respetuosa de la voluntad popular”, agregó, tras recordar que la duración media de los Ejecutivos en el país es de menos de un año y medio.

Algunas definiciones de Meloni ante los diputados

Entre otros puntos, la primera ministra sostuvo que con su gobierno buscarán “ir hacia un sistema de semipresidencialismo como en el sistema francés: que quien gana pueda gobernar por cinco años”.

“Una reforma que garantice la estabilidad y restituya la centralidad a la soberanía popular, que permita a Italia pasar de una democracia de interlocución a una democracia decisiva”, detalló.

Más tarde agregó querer “liberar las mejores energías de esta nación y garantizar a los italianos un futuro de mayor libertad, bienestar y seguridad”, para luego señalar que “Italia hará sentir fuerte su voz dentro de las instituciones europeas, no para sabotear, sino para contribuir a enderezarlas a una relación más cercana a ciudadanos y empresas”.

“La Unión Europea para nosotros es la casa común de los pueblos europeos”, resaltó y aseveró que “este gobierno respetará las reglas en curso” en materia financiera dentro del bloque.