Las ruinas de Antigua Jericó fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad
El sitio arqueológico de Tell es-Sultan, también conocido como Antigua Jericó, fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por su importancia histórica.
El Comité del Patrimonio de la Humanidad declaró que las ruinas prehistóricas de la ciudad bíblica de Jericó, ubicadas en Cisjordania, son Patrimonio de la Humanidad. Esta decisión fue rechazada por Israel, que no reconoce la existencia de un Estado palestino.
Jericó, uno de los asentamientos urbanos más antiguos del mundo, se encuentra en territorios ocupados por Israel y es administrado por el gobierno autónomo palestino. La Autoridad Nacional Palestina (ANP) es reconocida como “estado observador no miembro” en la ONU, representando a todos los palestinos.
El sitio arqueológico de Tell es-Sultan, también conocido como Antigua Jericó, fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por su importancia histórica. Este yacimiento contiene ruinas que datan del noveno milenio antes de Cristo, lo que lo convierte en un testimonio invaluable de la antigüedad de la civilización humana.
Israel, que abandonó la Unesco en 2019 alegando sesgo antiisraelí, ha rechazado tanto la inclusión de Palestina como miembro de la organización en 2011 al igual que esta reciente designación de Jericó como Patrimonio de la Humanidad.
A pesar de su ausencia en la Unesco, Israel continúa siendo parte de la Convención de Patrimonio de la Humanidad, enviando un delegado a la reunión en Arabia Saudita, donde se llevó a cabo la votación.
Cabe mencionar que la designación de Tell es-Sultan como Patrimonio de la Humanidad resalta su valor arqueológico, que abarca desde los primeros asentamientos hace 9.000 u 8.000 años antes de Cristo hasta los vestigios de planificación urbana de la Edad de Bronce Temprana.