Nuevos ataques rusos contra Ucrania

Una serie de ataques rusos con drones y misiles tuvo lugar el día de ayer hacia territorio ucraniano. La acción impactó en varias regiones del país, dejándolas sin suministro de agua y electricidad. Entre algunas de las ciudades que sufrieron del avance ruso están Kiev, Jarkov, Zaporiyia, Dnipro y Odesa. Vitali Kltischko, alcalde de Kiev, confirmó que los ataques estuvieron dirigidos hacia infraestructuras energéticas. Tan solo en la capital, los bombardeos dejaron sin luz a cerca de 350.000 viviendas. Ante el pedido a la población de no entrar en pánico, el político sostuvo: “Deben estar atentos a las informaciones de las autoridades”. Por su parte, el Ejército ucraniano, a través de Telegram, mencionó que “más de 50 misiles de crucero fueron lanzados”. “Desde las 7 del 31 de octubre, los ocupantes rusos llevaron a cabo varias oleadas de ataques con misiles contra infraestructuras críticas en Ucrania”, agregaron al respecto. Del total de misiles, unos 44 fueron derribados y uno cayó en territorio moldavo, junto a la frontera ucraniana, sin causar víctimas.

Tras el accionar, una de las voces que salió al cruce ruso fue la del canciller de Ucrania, Dmitro Kuleba, quién a través de sus redes señaló: “Rusia hace esto porque todavía tiene los misiles y la voluntad de matar ucranianos”. Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que “todos los objetivos designados fueron alcanzados” y que los ataques fueron producidos con armas de “alta precisión”. Por lo pronto, de ningún bando han informado víctimas fatales, aunque no desestiman que llegue a aparecer alguna con el correr de las horas. Desde Moscú agregaron que este nuevo ataque viene como respuesta a la explosión del camión cisterna en Crimea.

Noruega elevó su alerta militar

En medio del conflicto bélico entre estas naciones, el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, confirmó en una conferencia de prensa que reforzará la situación de seguridad en el país: “Estamos en la situación de seguridad más grave en varias décadas. No hay ninguna indicación de que Rusia vaya a ampliar su acción militar a otros países, pero el aumento de la tensión hace que estemos más expuestos a amenazas y al espionaje. Todos los países de la OTAN deben estar en guardia, también Noruega”.