Un catalán preso por rapear
Pablo Hasél es un joven rapero condenado por “enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona”. Su encarcelamiento ha provocado fuertes protestas en España.
Hace una semana que en las calles de España se puede ver a la población reclamando la libertad de Pablo Hasél, condenado a nueve meses y un día de prisión por “enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona”, por el contenido de 64 tuits y una canción de su autoría.
Las marchas a favor de la libertad de expresión y otras reivindicaciones han terminado en disturbios, y los detenidos y heridos se han multiplicado en reclamo de la libertad del cantante, cuyas letras de contenido crítico molestan a la Corona española.
Pablo Hasél irrumpió hace una década en la escena underground española, y era un ilustre desconocido cuando su nombre salió por primera vez en los periódicos en 2011, tras iniciarse contra él un proceso judicial por la letra de sus canciones.
Su nombre es Pau Rivadulla Duró, es hijo de un profesor de Matemáticas que entre 2007 y 2010 fue presidente del club de fútbol Unión Esportiva Lleida. A pesar de tener un padre docente, abandonó el bachillerato para dedicarse al rap.
Hace algunos años afirmó que tenía claro que acabaría entrando en prisión, una pena que estaba dispuesto a pagar porque creía que serviría de altavoz para sus ideas comunistas y antifascistas .
Aunque su ingreso en prisión, el pasado martes, lo ha llevado a la primera plana de los periódicos nacionales e internacionales, su primera detención data de hace casi una década.
En octubre de 2011, con 23 años, fue arrestado por el contenido de sus canciones y condenado años más tarde. En la actualidad acumula dos condenas firmes por “enaltecimiento del terrorismo e injurias y calumnias a la Corona”. La primera llegó en 2014, con una sentencia a dos años que fue confirmada por el Tribunal Supremo en 2015 y cuya ejecución fue suspendida en 2019 porque no tenía antecedentes penales.
En 2018 fue condenado de nuevo por los mismos delitos a dos años de cárcel y una multa económica. Hace unos meses el Tribunal Supremo ratificó esta condena pero rebajó la pena a 9 meses y un día de prisión, con tres votos a favor y dos en contra. Ahora las circunstancias han sido diferentes, porque ya sí cuenta con antecedentes penales, por lo que no cabía la suspensión de su entrada en un centro de reclusión.
Además, se ha enfrentado en otras dos ocasiones con la Justicia, lo que le otorgó otras dos sentencias condenatorias.
Pablo Hasél comenzó a hacer rap en 2005, cuando aún era menor de edad. Desde entonces ha distribuido todos sus trabajos de manera gratuita en internet.