Avanza la denuncia contra Milei por llamar “coimeros” a diputados

La denuncia contra el Presidente Javier Milei por haber llamado “coimeros” a diputados y senadores nacionales por las demoras en el tratamiento de la denominada ley ómnibus tramitará, finalmente, en los tribunales federales de Comodoro Py ante el juzgado federal número seis, hoy subrogado por el juez Ariel Lijo, con intervención de la fiscal Alejandra Mángano.

El expediente 4606/2023 contempla la denuncia del abogado y exfuncionario bonaerense del área de seguridad, Leonardo Martínez Herrero, quien radicó la primera denuncia a fines del año pasado por las declaraciones del jefe de Estado ante un canal de televisión. “La maquinaria del Congreso le pone tanta lentitud que estropea todo. Parte de esa lentitud es porque buscan coimas. Algunos, no dije todos. Pero a esos que les gusta tanto la discusión, que discuten la coma, están buscando coimas. Esto apunta contra los corruptos, esa dinámica para vender sus votos”, dijo Milei en aquella oportunidad.

Entonces, Martínez Herrero pidió al magistrado que en principio cite a Milei a declarar como testigo bajo juramento de verdad para que aporte todo lo que sepa respecto a ese delito al que aludió en una entrevista periodística y, con base en ello, se abra una investigación. Una de las medidas de prueba solicitada era que profundice sobre las acusaciones e identifique a los legisladores a los cuales hacía referencia. De no aportarse nada, solicitó el exfuncionario, “se inicie la investigación contra el Sr. Presidente por los posibles delitos de incumplimiento de funcionario públicos tras no haber efectuado la denuncia correspondiente o el de encubrimiento”.

El mandatario nacional no se presentó ante la Justicia en el marco de esta causa y, finalmente, Martínez Herrero ratificó su denuncia el pasado 7 de febrero, por lo que determinó la tramitación en Comodoro Py.

Cabe recordar que el jefe de bloque de diputados de Unión por la Patria, Germán Martínez, también radicó una denuncia similar ante los tribunales federales de Rosario, pero como la de Martínez Herrero fue anterior, fijó la competencia en los tribunales porteños.