Las escuelas bonaerenses recuperan el tiempo perdido en la pandemia

El jefe de Gabinete de la Dirección General de Cultura y Educación (DGCE) bonaerense, Pablo Urquiza, destacó la importancia de la continuidad educativa a través del programa Escuelas Abiertas en Verano, que involucra a más de 10.000 docentes y 5.000 auxiliares y que permite “recuperar lo que se perdió en la pandemia” de Covid-19, la enfermedad provocada por el virus SARS-CoV-2.

Urquiza es un hombre clave de la administración de Alberto Sileoni, quien comanda la cartera educativa provincial. A casi tres años del estallido de la pandemia global de Covid, que afectó el dictado de clases durante los años 2020 y 2021, el funcionario subrayó la función de las clases veraniegas como forma de volver a ganar el terreno perdido con la suspensión de la presencialidad y el pase a la modalidad telemática, que dejó necesariamente afuera a parte de los alumnos.

“Las familias bonaerenses saben que el mejor lugar para los chicos, después de la casa, es la escuela”, dijo Urquiza. Y definió al programa de escuelas de verano como “la continuidad de recuperar lo que se perdió en la pandemia, que es el disfrute de que la escuela esté abierta todos los días”.

El programa Escuelas Abiertas en Verano comprende a 1.880 establecimientos repartidos entre los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires y brinda continuidad escolar a más de 200.000 alumnos durante cuatro horas al día, de lunes a viernes. También se entregan las viandas del Servicio Alimentario Escolar (SAE).

La particularidad de esta instancia es que los contenidos se relacionan con lo lúdico y lo vacacional, involucrando el deporte y las actividades acuáticas. En años anteriores se había implementado bajo el nombre de +ATR, definido como un “programa de intensificación de la enseñanza”; en julio del año pasado, la DGCE decidió reconvertirlo para generar este nuevo formato.

Docentes con “pasión por el trabajo”

En una entrevista con el diario Página/12, Urquiza destacó el acompañamiento que los docentes bonaerenses vienen brindando a la iniciativa, que supone, lógicamente, una carga extra de trabajo para dictar clases durante el receso veraniego.

“Queremos poner de relieve el trabajo que hacen miles de docentes, lo que demuestra la pasión por el trabajo y el interés de fortalecer la vinculación dentro de la comunidad educativa”, dijo el jefe de Gabinete de Educación. Y comentó que el acompañamiento de los maestros y maestras “es producto de las condiciones laborales generales garantizadas por el gobierno comandado por (Axel) Kicillof”, gobernador de la Provincia.

“Tenemos la visión de que, con más días de clases, más días de escuela, de contacto de los docentes con los alumnos, se va fortaleciendo ese vínculo”, resaltó Urquiza. “El año pasado se buscaba la revinculación de los chicos que habían tenido una discontinuidad con el sistema educativo producto de la pandemia; (en 2023) es una continuidad de los 189 días de clases, de un calendario de 190 días, que hubo el año pasado”.