Vizzotti presidió la Reunión de Ministros de Salud con sus pares de Brasil, Paraguay y Uruguay
Los ministros firmaron una declaración para facilitar el tránsito seguro y fortalecer la producción regional de insumos estratégicos con el fin de atenuar los efectos de la pandemia.
La titular de la cartera sanitaria nacional, Carla Vizzotti, presidió este miércoles la Reunión de Ministros de Salud con sus pares de Brasil, Paraguay y Uruguay que culminó con la firma de declaración conjunta en la que expresaron la voluntad de continuar trabajando de manera conjunta, coordinada y solidaria para poder alcanzar respuestas que permitan atenuar los efectos de la pandemia de COVID-19 en la región y sus consecuencias sanitarias, económicas y sociales.
“Fue una discusión muy rica y genera mucha expectativa en función de las posibilidades futuras”, aseguró Vizzotti, durante la conferencia de prensa que brindaron los funcionarios tras el encuentro y en la que también dieron detalles de la declaración conjunta.
La ministra explicó que “Latinoamérica ha sido la región que más impacto ha tenido en relación a la pandemia” y destacó que “también junto con la región de África ha sido quien ha accedido de forma más inequitativa a los insumos para dar respuesta a la COVID-19”.
Sin embargo, Vizzotti puso en valor que “América del Sur es la región que más ha podido avanzar en materia de vacunación con esquema completo del mundo”. En ese sentido, destacó como una gran fortaleza de la región “la confianza que tiene nuestra población en las vacunas y en los programas ampliados de inmunizaciones”.
Tras el análisis realizado junto a sus pares de Brasil, Uruguay y Paraguay, la ministra remarcó la visión compartida de “seguir avanzando fuertemente en nuestras campañas de vacunación”. Y aclaró que “el objetivo no es solo la disminución de casos sino prevenir la hospitalización y las muertes a causa del COVID-19 y que esto genere tensión en el sistema de salud”.
Por su parte, el ministro de Salud de Brasil, Marcelo Queiroga, destacó el “espíritu de colaboración y de unión entre nuestros países” y remarcó el compromiso alcanzado para “reforzar los sistemas de salud y ampliar la capacidad de respuesta de nuestros complejos industriales para obtener insumos de forma equitativa y más disponibles para nuestras poblaciones”.
El ministro de Salud y Bienestar Social de la República de Paraguay, Julio Borba, se mostró satisfecho con el encuentro y aseguró que los acuerdos a los que arribaron permitirán que “si eventualmente volviéramos a tener una situación de pandemia, nos va a encontrar mucho más comprometidos, mucho más unidos y más colaborativos entre todos”.
En tanto, el ministro de Salud de Uruguay, Daniel Salinas, subrayó la sinergia de trabajo que se dio entre las distintas delegaciones “que enaltece la cooperación y marca la presencia regional”.
“Nos merecemos como región proyectarnos y que nuestra voz sea oída. En ese sentido, trabajamos fuertemente en homologación de certificados de vacunación y en facilitar el tema transfronterizo para hacerlo más fluido”, afirmó Salinas, quien destacó también el alineamiento también en secuenciación genómica, y tratamientos y dispositivos terapéuticos de alta calidad contra la COVID-19.
En la declaración, firmada en el Palacio San Martín, las autoridades expresaron su voluntad de implementar medidas complementarias y consensuadas de salud pública, específicas, proporcionadas, transparentes y temporales que favorezcan la circulación de bienes y personas para la recuperación económica y turística de la región.
En ese sentido, reconocieron que, en el actual escenario sanitario y epidemiológico, las medidas restrictivas en relación al tránsito en las fronteras deben ser consideradas extraordinarias y excepcionales, intensificando la vacunación y las medidas de cuidado con efectividad probada para reducir la propagación de la Covid-19.
Con respecto al ingreso de viajeros, se recomendaron como requisitos la presentación de esquemas iniciales completos de vacunación para lo cual se considera que el plazo mínimo para considerarse completo es transcurrido entre 14 días y hasta un máximo de 9 meses de aplicada la dosis que completa el esquema inicial.
Las autoridades acordaron trabajar para homologar regionalmente los certificados de vacunación emitidos por los países participantes, y en ese sentido, aceptar todas las vacunas contra la COVID-19 autorizadas por ellos.