Atacaron salvajemente a una enfermera para robarle mientras esperaba el micro
Al levantarse se percató de que le faltaba su cartera, en la que tenía varias pertenencias personales y dinero en efectivo, además de las llaves de su casa.
Una enfermera fue víctima de un salvaje robo en Los Hornos al ser atacada por al menos un ladrón, que la agredió con un objeto contundente y la golpeó en la cabeza mientras esperaba el colectivo para ir a trabajar, informaron ayer fuentes policiales.
El asalto se registró en horas de la madrugada de ayer en la zona de 140 y 49. La mujer estaba en la parada del micro aguardando la llegada de un interno de la Línea 307 con el fin de asistir a su lugar de empleo en un centro de salud de nuestra ciudad.
Entonces, apareció un hampón y, proyectil en mano, la abordó, aproximadamente a las 5. Le tiró la piedra sin dudarlo y la misma impactó en el cuero cabelludo de la damnificada, por lo que cayó, aturdida, al piso.
Al levantarse se percató de que le faltaba su cartera, en la que tenía varias pertenencias personales y dinero en efectivo, además de las llaves de su casa.
Quejas ante tanto robo
Sin comprender demasiado lo que había pasado y con la ayuda de algunos transeúntes que pasaban por allí, logró reincorporarse y les mandó un mensaje a sus familiares para que acudieran al lugar a asistirla. Al poco tiempo arribaron sus allegados con la tranquilidad de que el fuerte golpe que recibió no ponía en riesgo su vida.
En tanto, amparados por la oscuridad todavía reinante, los malvivientes, analizan si fueron dos, huyeron rápidamente con el botín en su poder, sin ser identificados. En ese marco, los vecinos de las inmediaciones señalaron que es una zona en la que falta iluminación. Eso, sumado a que en las proximidades hay un terreno baldío, lo convirtió en un sitio peligroso.
La mujer fue asistida por sus familiares y, según se supo, no hizo falta su hospitalización, ya que, por fortuna, la herida no terminó siendo profunda.
Personal de la comisaría Tercera analizan cámaras de seguridad, tanto públicas como privadas, para intentar dar con los implicados, aunque hasta el cierre de esta edición permanecían prófugos y no había pistas para dar con ellos. “Acá en Los Hornos ya estamos cansados de pedir seguridad. Marchamos todos los jueves, pero es tierra de nadie. Ahora atacaron a una enfermera que esperaba un micro para ir a trabajar, es una vergüenza”, dijo un frentista.