Declaró el médico que realizó la autopsia al cuerpo de Fernando: "Nunca vi algo semejante"

El médico de Policía Científica Diego Duarte, quien practicó la autopsia al cuerpo de Fernando Báez Sosa, declaró hoy que el joven presentaba "múltiples agresiones en la parte del rostro", "muchas lesiones importantes en la zona del maxilar derecho",  y "una importante hemorragia dentro del cráneo".

Al declarar como testigo ante el tribunal de Dolores que juzga a ocho rugbiers por el crimen ocurrido en enero de 2020 en Villa Gesell, el médico dio detalles del estudio forense, y los padres de Fernando optaron por retirarse de la sala de audiencias para preservarse.

Al salir de la sala, señaló ante la prensa que Fernando sufrió "traumatismo grave de cráneo por múltiples golpes, y lesiones en el sistema nervioso central y varios órganos".

Duarte detalló que Fernando presentaba "lesiones incompatibles con la vida y agregó que cree que "no hubiera tenido posibilidades de salvarse". 

"Nunca vi algo semejante", expresó el testigo, y agregó: "El paciente sufrió daño en todo el sistema nervioso central, tanto cerebro, cerebelo, tronco cerebral, no hay una lesión única, son múltiples...la verdad que es muy fuerte siendo padre...", dijo ante la prensa, antes de quebrarse.

En tanto, la médica Carolina Giribaldi Larrosa, integrante del equipo de emergencias que asistió a Báez Sosa tras ser atacado, también dio testimonio y aseguró que por el tipo de lesiones que presentaba, el joven "no tenía posibilidad de sobrevida" ya que "no tenía signos vitales" al llegar la ambulancia al lugar. 

En esa línea, especificó que su cuerpo presentaba "hematomas" en áreas vitales como "cara y cuello".

Luego relató que trasladaron a la víctima al Hospital de Villa Gesell asistida con oxígeno, mientras continuaban haciéndole masaje cardíaco.

El juicio

Durante la primera semana del debate declararon 47 testigos. Los imputados Thomsen, Luciano y Ciro Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli fueron identificados como agresores directos de Fernando, mientras que otros dos de los deportistas (Lucas Pertossi y Ayrton Viollaz) fueron ubicados entre quienes arengaban o golpeaban a amigos suyos que intentaban defenderlo.

El único acusado que no fue mencionado con una participación activa en el hecho en ninguna de las cinco audiencias fue Blas Cinalli, aunque una joven que declaró citó mal su nombre y un efectivo policial dijo que estaba presente en el lugar de acuerdo a uno de los videos que registraron la escena del ataque y que fueron exhibidos durante el debate.

Además de la imputación por “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”, los rugbiers están siendo juzgados por las lesiones sufridas por los amigos de la víctima.