El caso Fernando Báez Sosa, bajo la mirada de un abogado penalista platense
El reconocido profesional Martín De Vargas analizó el crimen del joven y el juicio que se les sigue a los rugbiers. ¿Pacto de silencio o estrategia de la defensa?
En diálogo con diario Hoy, el abogado platense experto en casos penales, Martín De Vargas, analizó el proceso judicial contra los ocho rugbiers acusados de haber asesinado a golpes a Fernando Báez Sosa durante la madrugada del 18 de enero de 2020.
Los imputados por el hecho son Máximo Thomsen (22), Ciro Pertossi (22), Luciano Pertossi (20), Lucas Pertossi (23), Enzo Comelli (24), Matías Benicelli (22), Blas Cinalli (21) y Ayrton Viollaz (23). Si bien en principio también estuvieron acusados Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, con el curso de la investigación ambos fueron sobreseídos por falta de pruebas.
Con respecto a que los imputados se pusieron de acuerdo para cometer el asesinato, De Vargas comentó: “No creo que hayan planificado matar, pero con su actuar era probable y previsible que el resultado muerte se pueda dar. Según testigos y pericias telefónicas, los acusados planificaban atacar a personas en inferioridad numérica, generaban un acto de provocación esperando la reacción del otro y si este reaccionaba comenzaba la pelea adentro y luego afuera de un local bailable generalmente. En lo que nos interesa, jurídicamente los acusados utilizaban un medio idóneo para causar la muerte con un modus operandi planificado o premeditado”.
Por otra parte, el profesional indicó que no cree que “exista un pacto de silencio” entre los rugbiers. “A mi modo de ver y tal como se viene sucediendo en las diversas jornadas del juicio, el silencio controlado es parte de una estrategia de defensa en un juicio donde casi todo el caudal probatorio compromete a los acusados”, sostuvo.
Con referencias a las pruebas en contra de los acusados, el letrado destacó que “cada elemento probatorio es como una pieza de un rompecabezas que a medida que transcurre el juicio oral se va completando, de modo que testimonios, pericias telefónicas, pericias fílmicas, fotográficas, médicas forenses, de rastros, planimétricas y de ADN deben ser evaluadas unas en función de las otras. En este sentido hay coincidencias avasallantes entre los relatos de los testigos, los videos y los rastros de ADN de Fernando encontrados en los agresores y sus prendas arrojan claridad sobre las circunstancias de modo, tiempo y lugar del hecho así como los roles de cada uno de los imputados”.
¿Perpetua para todos?
Sobre la posibilidad de que los ocho implicados reciban perpetua, De Vargas consideró que “hasta el momento, la estrategia de la defensa más efectiva para alguno de los imputados fue rechazar la posibilidad de que el juicio se realice con jurados populares, principalmente debido al impacto social y mediático del caso, con el cual sin duda hubieran obtenido una condena a perpetua para todos. Los jueces técnicos van a analizar de otra forma las cuestiones respecto a la autoría y participación criminal de cada uno de los imputados, donde al menos a dos de ellos se le abre alguna posibilidad de obtener una participación secundaria con una pena menor”.