Le concedieron salidas laborales a uno de los acusados en la causa al empresario Mercerat

El Tribunal Oral en lo Criminal n°2 de La Plata le concedió salidas laborales a Pedro Marcelo Bardella, el albañil y plomero acusado de participar en una red de prostitución en la cual fue condenado a cinco años y seis meses de prisión el empresario inmobiliario Fernando Mercerat.

Los abogados Christian Parodi y Fernando Palazzo habían realizado la presentación y adjuntaron nota del empleador del albañil. La empresa en la que Bardella realizará sus tareas se encuentra en la localidad bonaerense de Ensenada, de lunes a viernes desde las 8 hasta las 13.

Los defensores del acusado destacaron que el imputado y su grupo familiar se encuentran en una situación de extrema pobreza, y que con la remuneración de este empleo el hombre colaboraría con el sostén económico de sus cuatro hijos, uno de los cuales es un bebé recién nacido.

Parodi y Palazzo también dijeron que Bardella tiene una familia numerosa y que siempre ha trabajado; y que actualmente dada su situación de pobreza recibe ayuda de un hermano que vive en Capital Federal, por lo que solicita trabajar para poder mantener a su familia, que vive en Melchor Romero.

El acusado se encuentra gozando de arresto domiciliario bajo el control de monitoreo electrónico desde el día 11 de noviembre de 2020 sin que se hayan registrado incidentes. El sujeto será monitoreado con el Sistema de Posición Global (GPS), que es una tecnología complementaria al equipo de monitoreo ya instalado en la vivienda del imputado.

Domiciliaria a Bardella

Además de acusado, la declaración de Bardella ayudó a esclarecer los roles y los delitos que se cometieron y cuyo líder fue Mercerat, según el acuerdo abreviado aceptado por este y mediante el cual resultó condenado.

El albañil Pedro Bardella es defendido por los abogados Christian Parodi y Fernando Palazzo, y continúa con arresto domiciliario.

“Las travestis iban todas a la inmobiliaria, porque era la única que les alquilaba. (Los empleados del lugar) les decían las chicas de Fernando, venían siempre”, había comentado el plomero. “Yo trabajaba para la inmobiliaria de Mercerat, donde me mandaban a cobrar a todo tipo de lugares, donde había trabajadoras de la prostitución. En un momento me lo impuso, porque yo tengo muchos años trabajando con él, y la plata se la entregaba (al empresario)”, contó el imputado.