Lo perseguían por un robo y se pegó un tiro al verse acorralado

Un policía cordobés que estaba con licencia psiquiátrica terminó con un tiro en la cabeza y en grave estado, tras verse acorralado por la Policía de Córdoba, luego de que fuera perseguido como sospechoso de haber robado un auto, informaron fuentes policiales y judiciales.

Cabe mencionar que el herido, que al momento está internado en el Hospital de Urgencias, es un efectivo de la policía provincial, de 35 años, que se encontraba de licencia psiquiátrica y se desempeñaba como sargento.

Según voceros de la fuerza, todo comenzó cuando el hombre presuntamente sustrajo el vehículo en el barrio Poeta Lugones y se dio a la fuga.

Cuando los efectivos fueron alertados e intentaron interceptar al sospechoso, se produjo una serie de disparos, uno de los cuales dejó gravemente herido al supuesto ladrón. No obstante, si bien en un primer momento se creyó que la bala era de los uniformados, luego se supo que se disparó él mismo

Eso significa que el tiro que recibió en la cabeza el hombre fue con su propia arma, hecho que quedó confirmado por una grabación de una cámara en la calle Chavisacate al 1800, lugar donde fue interceptado por los agentes.

El ministro de Seguridad de la provincia, Juan Pablo Quinteros, contó a Canal 12 algunos detalles del hecho y explicó que todo comenzó cuando la Policía fue alertada por el robo de un auto.

“Hubo una persecución, un intercambio de disparos y el sujeto que había sustraído el vehículo resultó herido”, dijo el funcionario. El implicado se encontraba al cierre de esta edición en estado reservado, internado en el Hospital de Urgencias de Córdoba.

La fiscalía interviniente también confirmó que el sospechoso de robar el auto es un oficial de la fuerza que estaba inactivo porque hace pocos días había presentado una carpeta psiquiátrica.

Asimismo, toda la terrible secuencia quedó registrada por las cámaras de seguridad instaladas en el patio de la vivienda donde concluyó la persecución. Allí puede verse cómo el implicado intentó subirse al techo de la propiedad, pero no lo logró.

Al verse rodeado, se efectuó un disparo en la cabeza y quedó en el suelo. Sin embargo, el ángulo del disparo solo le produjo una herida superficial, por lo que volvió a darse un tiro en la sien, está vez con un resultado mucho más grave.