TENIS

Diego Schwartzman, el único argentino que sigue en Roland Garros

La jornada de ayer trajo nuevas eliminaciones para los tenistas nacionales, con el azuleño Federico Delbonis y Pedro Cachín que cayeron en segunda ronda. Hoy, el Peque va ante Dimitrov.

En el segundo torneo Grand Slam del año, Diego “Pe­que” Schwartzman es el único tenista argentino que sigue en competencia. El número 16 del mundo saldrá a la cancha esta tarde para enfrentarse al búlgaro Grigor Dimitrov por el cuadro de la tercera ronda.

Desde las 6, Schwartzman saltará a la cancha del Court Simonne-Mathieu en busca de su tercera victoria en el certamen. El Peque llega al duelo tras ganarle sucesivamente al ruso Andrey Kuznetsov (228°) en cuatro sets, y al español Jaume Munar (87°) en un durísimo partido que se estiró hasta el quinto set.

Por su parte, Dimitrov, el número 20 del mundo, se impuso ante el croata Borna Coric y el estadounidense Marcos Giron respectivamente.

Mientras tanto, los dos tenistas argentinos que se presentaron en la jornada de ayer en Roland Garros, Federico Delbonis y Pedro Cachín, perdieron sus respectivos partidos de la segunda ronda y se despidieron del Grand Slam que se juega sobre el polvo de ladrillo francés.

El azuleño Federico Delbonis, ubicado en el puesto 65 del ranking mundial de la ATP, cayó frente al Top 10 ruso Andrey Rublev (7°) por 6-3, 3-6, 6-2 y 6-3 en dos horas y 26 minutos de juego en el court Simonne-Mathieu del complejo parisino.

Por otro lado, Pedro Cachín perdió con el francés Hugo Gastón por 6-4, 6-2 y 6-4. Cachín, nacido en Bell Ville, Córdoba, y 153 del ranking mundial, no pudo con Gastón (74°) luego de dos horas y cinco minutos de juego.

El argentino, de 27 años, se lleva buenas sensaciones de su paso por París, ya que ingresó al torneo como lucky loser luego de haber perdido en la última ronda de la clasificación y se dio el gusto de lograr su primer triunfo en un Grand Slam al vencer en la ronda inicial al eslovaco Norbert Gombos (112°).

Otro tenista que se fue dejando un buen rendimiento en el campo de juego fue la joven revelación Sebastián Báez, quien batalló y exigió al siempre difícil y favorito alemán Alexander Zverev, quien lo superó por 2-6, 4-6, 6-1, 6-2 y 7-5 en tres horas y 40 minutos de juego.

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